Capitulo 2

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Entré al salón y como siempre me senté al lado de Madd y Gabi  un banco delante de nosotras.

Al empezar la clase nos distraimos hablando;

-Miles es mas lindo! -dijo Maddie pensativa-

-Callate, es mi hermano -dije dándole un golpecito en la cabeza-

-Y que? Es hermoso...

-Diuu! -dije levantando la voz sin querer-

-Señorita Jade, permanezca en silencio -dijo la profesora mirándome con la misma cara arrugada y sin hacer ningún gesto-

-Disculpa profesora...

Nos quedamos hablando bajito para que no escuche;

-Viste ayer? A la tarde? Fui con Miles a tomar helado y adivina a quien llevó? -dijo Madd molesta-

-A quien? -dije mirando al pizarron-

-A Adam.

Al instante miré a Maddie y mis ojos se abrieron como huevos y me sonroje.

-Ahh... -dije disimulando un poco- Sisi... -río- Adam -río-

-Que te pasa Jade? -dijo Madd arqueando una ceja-

POR QUE MIERDA TENIA QUE NOMBRAR A ADAM?!

-A mi? -río- Nada!! -dije levantando la voz-

-Señorita Jade! Afuera del salón! -dijo la profesora enojada-

-Pero...

-Pero nada!! Afuera!! -dijo aun molesta-

Me levante molesta y sin mirar a la profesora salí del salón.

Me senté en un banco que había por ahí y al levantar la vista veo que esta ADAM?!

-Hola -dijo sentándose a mi lado- A vos también te sacaron? -dijo observándome-

-Sí -dije mirándolo a los ojos-

Sus ojos eran perfectos. El color celeste de sus ojos se distinguía y brillaba.

-Que hiciste? -dijo soltando una risita-

-Estaba hablando con Maddie y de repente levante la voz y me saco -dije haciendo una mueca- Y vos?

Antes de que comienza a hablar me quede observándolo y al tocar mis mejillas estaban calientes y sonrojadas.

En un micro segundo, de lo que estaba diciendo, aunque no escuchaba nada, me miro y se quedó observándome raramente.

-Tienes fiebre? -dijo tocando mis mejillas que estaban hirviendo-

-No lose, me siento un poco mariada -dije mintiendo-

-Ven que te llevo a la enfermería -dijo tomandome de los hombros-

-Te sostengo por si te desmayas -dijo preocupado-

Al llegar me revisaron mientras Adam se quedaba afuera;

-No tienes fiebre ni signos de mareo -dijo la enfermera-

-Puedes decirle que tengo fiebre? -dije suplicando-

La enfermera, entendiendo todo, me dijo pícara;

-Esta bien...

Le pidió a Adam que pase y le informo de que tengo fiebre.

Mi hermano en un recreo me llevo a casa y se volvió porque hoy tenia gimnasia.

Me puse unos shorts de caballos voladores y una musculosa y me quede viendo tele.

Jade en multimedia!

"El amigo de mi hermano"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora