p r o l o g u e

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El novato frunció el ceño con extrañeza al notar una fémina tratando de entrar a su habitación, esta tocaba la ventana casi con desesperación. La chica suspiró sonoramente, hizo empañar el vidrio y escribió STANLEY.

Como por acto divino el chico del nombre escrito apareció por el pasillo y como la puerta estaba abierta aprovechó de dar una mirada fugaz hacía su habitación para que su compañero no se metiera en problemas durante las rondas de la mañana, y notó a su amiga.

—Francis, abre esa ventana.

—¿Quién diablos es?

El moreno rodó los ojos y se apresuró a abrirla.

—¿Qué onda, Stan?—saludó la chica. Se apoyó en el marco de la ventana—. ¿Quién es el nuevo? No me invitó a pasar, que descortés.

Francis Wilkerson parecía completamente perdido.

—Francis—respondió, siguieron hablando, se estaban poniendo al día, ella llevaba un par de semanas sin aparecer por ahí—. ¿Y qué pasó? ¿Qué hiciste está vez?

Se encogió de hombros prestándole importancia.

—Rehabilitación—respondió.

Al otro joven en la habitación le pareció buen momento para intervenir.

—Stanley, en serio, ¿quién es?

—¿Es retrasado?

—Francis no eres mi único amigo. Vive a un par de casa de aquí, viene de vez en cuando.

—Soy su mejor amiga, en realidad.

Francis agradeció internamente que lo agregaran a la conversación, pero su amigo dijo que era momento de ir con el director para las rondas, dejando a los otros chicos conocerse.

La chica rió mientras negaba con la cabeza.

—Sí, mi madre es una psicópata.

—Pero sí tú eres un niño problemático, diría pobre Lois.

—Oh, por favor, ese auto no era mío.

La morena negó y lo quedó mirando, un nuevo amigo, sonrió y golpeó levemente su hombro.




disastrously ( malcolm in the middle ! )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora