Muchas horas después del incidente Pinkamena reposaba tranquilamente en una de las camas del hospital, se encontraba semisentada cerca de la ventana portando un fino vendaje que cubría su ensangrentada frente; junto a ella se encontraba Fluttershy quien reflexionaba sobre lo ocurrido, su vista se posaba en Pinkamena una y otra vez pero no encontraba aquello que estaba mal, ella seguía viendo a una buena amiga que siempre le hacia reir.
-Espero que Twilight llegue pronto -exclamo Fluttershy en voz baja sin dejar de observar a su amiga
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Mientras esto pasaba, la pegaso Rainbow se dirigia a toda velocidad hacia la boutique de Rarity, necesitaba avisarle al resto de las Mane Six lo sucedido con Pinkie Pie, su perfecta técnica de vuelo le permtio llegar rápidamente a la puerta de la boutique para acto seguido tocar la puerta de una forma algo brusca.
Aquella forma de tocar la puerta provocó que Lil Miss Rarity despertara de su profundo sueño, se levanto algo molesta mientras su vista se adaptaba a la luz del lugar, bajó de su cama soltando algunos bostezos y con la magia de su cuerno tendió de forma perfecta las sabanas, ninguna ergencia era excusa para arruinar su habitación con unas sabanas destendidas.
Acto seguido se dirigió a su baño para peinar su preciosa melena, no podía recibir una noticia urgente sin estar presentable; el sonido de la voz de una pequeña potra la relajó, tal parece que su hermanita Sweetie Belle atendió a quien sea que estuviera tocando la puerta, finalmente podrá arreglarse sin estrés.
-¿Dormiste bien querida? -mencionó mientras se aplicaba sombra de ojos ayudada por el espejo del baño
No se escucho respuesta alguna, lo único que escuchaba era a Sweetie Belle y lo que parecía ser Rainbow Dash hablando, así que salió del baño algo preocupada para dirigirse a su habitación.
-Querida, ¿Estas ahí? -dijo nerviosa entrando a su habitación
-Bu! -exclamo Pinkamena Doll saliendo por sorpresa desde atrás de la puerta
Lil Miss Rarity cayó al suelo por el susto que le acababan de propiciar para segundos después reincorporarse algo molesta por la bromita, dirigiendo una mirada seria a la imponente muñeca
-¡Casi me matas del susto! -le replico Lil Miss Rarity acomodando su melena que tanto le había costado arreglarse
Pinkamena Doll solamente atino a reírse para después caminar hacia el ultimo cajón del mueble de la habitación, Lil Miss Rarity notó como todos los cajones estaban abiertos a excepción del ultimo.
-¿Se puede saber que estas haciendo? -preguntó Rarity bastante extrañada encendiendo la luz del cuarto
-No están ninguna de nuestras cosas "especiales" -respondió Pinkamena Doll mientras lanzaba al suelo los estambres y gemas que había dentro del cajón
Justo cuando Lil Miss Rarity se disponía a regañarla por el desorden que estaba provocando fué interrumpida por los asustados gritos de Sweetie Belle, la pobrecilla solo había subido para dejarle un recado a su hermana.
-¡¿Qué es eso?! -grito Sweetie Belle mientras retrocedía sin dejar de señalar a Pinkamena Doll
-Querida, es solo Opal -le contesto Lil Miss Rarity mientras miraba volteba a ver a la aterrada potranca-. Te lo explique hace mucho tiempo
En el momento en que Lil Miss Rarity volteó, Sweetie Belle quedo aun más aterrorizada, pudo ver como su hermana tenía el cuerpo lleno de heridas así como un profundo rasguño en el ojo derecho, al ver esto lo único que pudo hacer fue salir corriendo, con el propósito de buscar a alguien que ayudara a su hermana.
-Definitivamente esa no es mi hermanita -exclamo Lil Miss Rarity viendo a Sweetie Belle escapar a toda velocidad
-Ni nuestra casa -añadió Pinkamena doll terminando de revisar el cajón restante
Al oir esto, Lil Miss Rarity corrio hacia una de las ventanas para ver el paisaje; el día era realmente hermoso, las calles limpias, los puestos de comida recibiendo a los lindos ponis hambrientos, era como si todo volviera a la normalidad.
-¡El mundo es normal otra vez! -dijo Lil Miss Rarity entusiasmada volteando a ver a Pikamena doll-. ¡Y esta vez estas conmigo!
-¿Esta vez? -dijo Pinkamena doll asombrada poniendose al lado de Lil Miss Rarity para ver el paisaje
-¿Sera está mi oportunidad para hacer las cosas bien? -menciono Lil Miss Rarity con un tono reflexivo-. Volver a ser la mejor modista de Poniville abandonado mis lascivos deseos
Ambas se miraron por unos segundos a los ojos, para justo despues caer al suelo nuriendo de risa por la idea, era obvio que ninguna de ellas tenia intencion de abandonar la diversión
-Bien, hay que evitar lo que paso la ultima vez -dijo Lil Miss levantandose para recuperar su compostura-. Necesitamos encontrar a Applejack
-A la orden mami -le contestó Pinkamena Doll con un tono coqueto
