Jeon JungKook es el Rey de Seúl, un alfa pura sangre, cambia-formas, su actitud dominante, lo hacen uno de los mejores alfas, además de tener el rango mayor.
El rey tiene su propio harem de omegas, hombres y mujeres forman parte de él.
Un omega ha l...
El aroma de ambos estaba en la habitación, lo único que se podía escuchar era sus respiraciones agitadas, los gruñidos del rey y los jadeos del omega, al sentir como el rey, simulaba penetraciones.
El omega sabía que esto era incorrecto, pero no deseaba detenerse, tal vez... Tener al rey de su lado, pueda servirle de ventaja.
El rey Jeon se aleja, junta su frente a la del omega, Taehyung respira agitado, sus ojos están cerrados, sus labios arden, probablemente estén rojos e hinchados, el alfa está respirando agitado y apretando su cadera.
-Kim Taehyung -el omega abre sus ojos, mirando al rey- Eres totalmente exquisito y desearía besarte aún más.
-Rey Jeon -tímido-
-Pero es hora de que te retires -se aleja y baja al omega, que lo mira con confusión- Tengo una reunión con el consejo, voy tarde y soy el rey.
-Pero- -suspira-
-Puedes irte a tu habitación, no quiero problemas, Kim Taehyung, así que evitalos -lo mira con seriedad- Mi harem tiene reglas, respetalas y podrás vivir con tranquilidad.
-Si, rey Jeon.
El rey se acerca y deja un último beso en los labios del omega, muerde su labio, se separa, sonríe y le guiña un ojo, haciendo al omega sonrojar.
El omega sale de la habitación totalmente sonrojado y hecho un desastre, toca sus labios, sin darse cuenta de la presencia de alguien más, sonríe.
-Entonces, tu eres el famoso, Kim Taehyung -el omega levanto la mirada y había otro omega, rubio, con mejillas regordetas, labios rosados y una mirada de superioridad-
-Sí, ¿tu quien eres?
-Mucho gusto -sonríe falsamente- Soy Park Jimin, el favorito del rey.
Taehyung se quedó mirando a Park Jimin, que lo miraba con una sonrisa falsa y superioridad.
El omega era muy bonito, Taehyung no iba a negar que era obvio que sería el favorito, cuando el omega tenía un buen cuerpo y un rostro hermoso.
Pero, se veía superficial, lleno de joyería y esa ropa, no parecía solo un omega más del harem, parecía el príncipe de Seúl.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Mucho gusto, Park Jimin -sonrió, algo nervioso, no quería problemas y el omega frente a él, no se veía amable-
-Lamento no decir lo mismo -cruza sus brazos- En realidad, no me da gusto conocerte.
El omega le mira confundido.
-¿Acaso te hice algo? -alza una ceja-
-Eso espero, que no pienses siquiera en molestarme -se acerca- Aunque tu simple presencia ya me molesta.
