♕︎𝑭𝒂𝒗𝒐𝒓𝒊𝒕𝒆♕︎ •𝑲𝒐𝒐𝒌𝑻𝒂𝒆•

D I E Z

Fuego.

Todo estaba en llamas.

Y un pequeño cachorro lloraba al ver a todo el mundo pelear. Espadas, sangre, gritos.

Su mirada iba de un lado a otro, no debía hacer ruido, venían por él, la amenaza había sido clara. Lo había prometido, él le había hecho jurar que no haría ruido alguno para poder protegerlo.

-¿¡Donde tienes a ese pequeño bastardo, Su Yeon!?

-¡Jamás vas a llevártelo!

Su Yeon, su madre, ¿era su madre?

Desde su escondite vio su cuerpo caer, soltó un sollozo, sintió como lo tomaron fuertemente, comenzó a gritar, pero nadie lo escuchaba, buscaba a alguien con la mirada, pero era imposible, todo estaba en vuelto en llamas y no había nada que pudieran hacer.

-Eres mi pequeña mina de oro, Kim.

-¡NO! ¡SUELTAME! ¡MAMÁ! ¡PAPÁ!

-Ellos están muertos, tu los mataste, Kim.

El pequeño cachorro lo miró con miedo y lágrimas.

Todo se volvió negro.

El omega abrió sus ojos de golpe y se levantó, sus ojos estaban llenos de lágrimas, pero un dolor en su abdomen lo invadió, soltó un quejido.

Rápidamente sintió unas manos tocarlo, levantó su mirada asustado, hasta que encontró esos ojos negros.

Todo había sido un sueño, un recuerdo, ¿ese era su verdadero origen?

-¿Taehyung? ¿Estás bien? ¿Que pasa?

-Mi mamá, mi papá...

-¿Que pasa?

-Él me secuestro, él no es mi verdadero padre -dijo entre lágrimas-

-Cariño, tranquilo, ¿de que hablas?

-Soñe con mi pasado, él me secuestro, mi hermana -desesperado- Tenemos que sacar a mi hermana de ahí.

Jungkook estaba sorprendido, ¿Taehyung fue secuestrado?

-¿Que soñaste, Taehyung?

-Había fuego, gritos, peleas, yo estaba escondido, vi a mi madre caer, pero no vi su rostro... -tomo la mano de Jungkook- Tienes que ayudarme, alfa, tengo que sacar a mi hermana de ahí, ese tipo podría venderla, hacerle daño...

-Lo haremos, Taehyung, tranquilo -besa sus manos- Haré todo por traer a tu hermana, daré la orden ya mismo.

Después de eso, Taehyung se refugio en los brazos de su alfa.

Había recordado, una pequeña parte de quien era en realidad.

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El alfa miraba el precioso jardín del reino Jeon, en sus pensamientos solo estaba la decisión que le tomo horas hacer. Sentía a su lobo molesto, pues estaba a punto de renunciar a su destino. Kim SeokJin.

Jungkook le había dicho sobre el beso, le había dicho las palabras exactas que había usado la persona que amaba, y aunque en un principio pensó en perdonarlo, simplemente no podía seguir rogando por un amor que no le iba a ser dado.

NamJoon siempre pensó que SeokJin podría amarlo con la intensidad que él lo hacía, pero, se había equivocado, y era momento de dejarlo libre. Se volteo y miro el bonito anillo de compromiso que su omega había dejado de usar, lo tomó y sonrió, dolía, dolía demasiado, pero lo mejor era alejarse.