Me convertí en la esposa del monstruoso príncipe heredero [COMPLETA]

Capítulo 94 - Un hombre guapo y un monstruo (14)

"No pensé que nos casaríamos. Ni siquiera me atreví a soñar con eso. Sabes, tengo la maldición. No viviré tanto tiempo, pero hasta entonces, quiero protegerte. Este lugar será una valla fuerte para ti hasta que te conviertas en un adulto. Serás libre una vez que yo muera ".

Blake esperaba que Ancia no se sintiera frustrada por su matrimonio, así que preparó lo que le diría y practicó duro.

Pero la realidad no fue como pensaba. Cuando regresó a su habitación después de la boda, se quitó la máscara y entró Ancia.

Cuando Ancia vio su rostro, cerró la puerta y salió corriendo. Blake no tuvo la oportunidad de decir lo que había preparado de antemano.

Ese día, Ancia cayó al lago. Pensó que estaba tan sorprendida al ver su rostro que trató de suicidarse.

Blake salvó a Ancia de ahogarse en el lago.

"¡Si-si realmente me odias...! "

No tenía por qué pensar en ellos como pareja. No, ni siquiera podía soñar con eso en primer lugar. Estaba maldito y no le quedaba mucho tiempo de vida. Solo quería protegerla hasta entonces.

Las palabras que había practicado con tanta diligencia todos los días se negaban a salir. Ancia perdió el conocimiento mientras Blake entraba en pánico y lloraba.

Olvidó que era un monstruo. Un alma maldita por la diosa. Era el ser más terrible del mundo.

'Bien, no hay ningún beneficio en estar a mi lado. ¿Y si Ancia muere por mi culpa?

Blake se culpó a sí mismo. Ancia podría querer divorciarse de él tan pronto como se despierte.

Realmente tuvo un sueño imposible. Todos los sirvientes lo despreciaron. Debe haber odiado cuando se casó con él.

¿Y si me culpa por salvarla? ¿Y si dice que está mejor muerta?

El tenía miedo.

Luego, unos días después, Ancia llegó a su habitación.

"¡No-no mires!"

Blake se escondió rápidamente bajo las mantas presa del pánico. Si volvía a ver su rostro, seguramente Ancia lo odiaría. Pero Ancia le quitó la manta a Blake y hasta le quitó la máscara.

Ancia miró el rostro de Blake y dijo: "No eres horrible".

Fue un comentario inesperado. También dijo que se cayó por error y le agradeció por salvarla.

"Me gustas."

Ella dijo algo que él pensó que nunca volvería a escuchar.

"Yo también. Tú también me gustas."

Blake confesó sus sentimientos con timidez. Él profesó sus verdaderos sentimientos, y no los comentarios falsos que había preparado de antemano.

Ancia tomó la mano de Blake mientras se dormían juntos.

Desde que Blake fue maldecido, siempre había tenido pesadillas todas las noches.

No recordaba muy bien el contenido. Todo lo que podía recordar era una llama caliente y el grito desgarrador de una mujer.

Cuando abrió los ojos, le dolía todo el cuerpo y cuando se durmió, tuvo pesadillas. No hubo un solo momento en el que se sintiera en paz.

Pero, extrañamente, no tuvo pesadillas esa noche. Se sintió envuelto por una luz cálida. También al día siguiente, cayó en un sueño profundo y confortable. Desde que empezó a acostarse con Ancia, sus pesadillas desaparecieron.