CLUB DE CONQUISTAR MUJERES [Editando]

20_Recomendación

Luego de esa riesgosa experiencia que Marinette obtuvo en la escuela, sus padres quisieron demandar, pero por suerte para el director de la escuela todo se pudo calmar cuanto antes.

Dándose cuenta de todos sus compañeros que la estimaban, corrieron hacia ella para abrazarla y para saber si se encontraba bien.

Afortunadamente si, y eso los tranquilizaba después de haberse asustado tanto.

-Que suerte que alcanzaste a llegar, Adrien, ¿Cómo lo hiciste?

Pregunto Nino muy ingenuo por no creer que tuviera los reflejos de su Miraculous cuando no lo esta usando, creyendo que si le podía llamar héroe porque salvo a su amiga a pesar de que estaban distanciados. 

-Sólo... escuche a mi corazón.

Él lo sintió o sólo quería estar junto a ella, acercando demasiado a esta que estuvo a tiempo de poder atraparla y no dejarla caer tan cruel y fríamente en el suelo. 

Estaba feliz por haberlo hecho, pero aún así su preocupación por ella no se iba a pesar que por otro lado también estaba feliz por sus amigos, Marc y Nathaniel que al ver esto no dudaron en decirse lo que sienten para estar juntos al fin. 

-Espera...- lo interrumpió Nino que estaba pensando una vez más lo que había dicho. -¿En serio? ¡¿Ya te diste cuenta que la amas?!

Grito de la emoción por ver que su mejor amigo por fin se quitaba esa ceguera que obtuvo por miedo a saberlo. 

-¿Qué? No, sólo sentí que no debía dejar que nada malo le pasase, es mi mejor amiga por lo tanto quiero lo mejor para ella.

Explico mirando a todos con una sonrisa mientras que Nino giraba ver al Kwami negro que se cubría el rostro con sentir pena ajena por su aun ciego portador.

***

Al otro día.

Una chica con cabellos morados se acercaba de manera cabizbaja hacia la escuela, algo deprimida por no saber a lo que su mejor amiga le ocurría.

Hace días que Rose ha cambiado de humor, un humor muy divertido, tierno, cariñoso, amoroso, abrazable, a veces un poco loco que solía tener la rubia, pero ahora, hace varios meses que ya no era así y no tenía ni la menor idea del porque.

Un día Rose la invito al cine para ver una tonta y ridícula película romántica, cuando Juleka quería ver una película de zombies que la gente tiene que matar, de acción y pelea.

¿Será que se molestó por ver una película de zombies y no de romanticismo?

Quien sabe, a veces las chicas tiernas son raras.

La chica Couffaine lo ignoro por completo para seguir con su vida normal, escuela, encierro en su habitación, rock and roll, burlarse de la friendzone de su hermano, comer y cosas esenciales para vivir.

-Hola, Rose ¿Cómo estuvo tu día?

Saludo Juleka que se acerco con su habitual seriedad de siempre mientras la chica de vestido rosa guardaba algunas cosas en su casillero.

-Bien, supongo. ¿Y el tuyo?

-Bien.

Se escucho un silencio enorme e incómodo, siempre era ella la cortante y la ojiazul siempre le sacaba la plática pero, esta vez no lo hizo, algo que pudo notar un chico de chamarra roja que estaba detrás de esos casilleros.