Una simple humana | Transformers

16. Habilidades útiles.

Doy un paso hacia atrás.

—Sí, lo hiciste —dice con tanta seguridad que se me eriza la piel rápidamente. Niego lentamente con la cabeza.

—Bee... —susurro nerviosa y rápidamente miro a Optimus, luego de nuevo a Daniel, quien ahora está más cerca de mí.

—Sí, lo hiciste, cuando quería hablar contigo... —él se mueve lento para intentar agarrar mi mano, pero rápidamente me muevo hacia la izquierda e intento entrar al coche, pero es inútil porque me logra atrapar del brazo quemado.

—Agh... —aprieta con fuerza cuando me empiezo a dar cuenta de que sus brazos comienzan a volverse de metal. Me tira salvajemente hacia atrás. —¡Bumblebee!

Se transforma instantáneamente y "Daniel" también termina de transformarse. Desde su espalda, aparecen cuatro alas de metal y toda la "piel" es reemplazada por hierro oscuro. Lo miro aterrorizada y sus ópticas rojo brillante me devuelven la mirada llena de odio. Trato de liberar mi brazo de sus garras, pero eso solo hace que me apriete más fuerte. Gimo de dolor en voz alta cuando Bumblebee comienza a disparar al Decepticon, pero se las arregla para evadir los tiros. Optimus, quien no había notado hasta ahora que estaba en su forma bípeda, también le está disparando y por suerte uno de sus tiros golpea una de las alas. El supuesto "Daniel" de metal gorjea, sisea y comienza a volar. ¿Y por qué no? Me toma del brazo en el proceso.

Grito cuando otra ráfaga de disparos pasan cerca de mí y finalmente uno cruza al Decepticon directamente a través del pecho. «Espera... ¡Maldita sea! Estoy como... a muchos metros del suelo».

Él suelta mi brazo y empiezo a caer. Grito más fuerte mientras la velocidad aumenta. Entonces, Bee salta, me toma, me sostiene contra su pecho y aterriza pesadamente en el suelo. Temblorosamente, miro hacia arriba y él me mira con esas ópticas azules preocupadas. Pongo mi cabeza en su mano a modo de agradecimiento y luego noto que mi brazo está sangrando un poco, además del vendaje roto. «Perfecto», pienso sarcásticamente.

«Mi mejor amigo era un maldito Decepticon que intentó secuestrarme. Eso ha sido genial...»

[***]

—¡Au!

—¡Deja de moverte!

—Lo siento, es que duele... —me quejo lastimeramente mientras Ratchet revisa mi brazo... Otra vez. Mi antebrazo está en palabras simples: mal.

Nos llevamos los restos de Daniel-Con con nosotros a un pequeño mercado abandonado. ¿Por qué? Primero, no podíamos dejarlo ahí y segundo, porque yo les pedí que lo hicieran. Llámame loca.

—¿Entonces ese era tu amigo? —pregunta Jazz, señalando al 'Con muerto.

—Lo he visto enfadado y estoy bastante segura de que no es Daniel.

—Rarito —comenta 'Hide, a lo que lo miro y él se ríe ligeramente.

—Eso es lo que decía la investigación, sobre transformarse en humanos... Pero, estoy segura de que hay un verdadero Daniel, no podía ser un Decepticon desde que éramos niños... ¿Verdad? —pregunto levantando una ceja.

—Si no fue un Decepticon todo este tiempo, probablemente ya esté muerto... —responde Ratchet.

Sus palabras no me ayudan mucho, así que miro hacia abajo, apenada.

—Pero... Tal vez no —digo. Aunque Daniel a veces puede ser un tonto, es mi amigo. —Dijiste "probablemente", no porque seguramente esté muerto... De todos modos, ¿sobrevivieron las cosas que compré? —le pregunto a Bumblebee, a lo que él asiente y me entrega las bolsas.