Scoups || To: My Dear Soldier

9►To: "My dear Soldier"

Punto de vista Seungcheol

El sonido atronador de su alarma lo sacó de su sueño. Su cuerpo se despertó de un salto, sentándose erguido. Mirando su teléfono dejó escapar un gemido. 6:00 AM. Cualquiera pensaría que estaría acostumbrado a levantarse tan temprano, pero estar en casa lo consentía. Seungcheol estaba acostumbrado a su propia cama, se despertaba y dormía cuando quería.

Te envió un mensaje rápido de buenos días y te dijo que tuvieras un buen día en el trabajo. Salió de la cama, caminó penosamente hacia su baño y finalmente aterrizó en la ducha. El agua caliente alivió el músculo tenso de su hombro. A este punto ya estaba curado pero dormir sobre él todavía lo ponía rígido. La idea de su reunión más tarde era lo suficiente para tensar todo su cuerpo nuevamente. No quería escuchar las palabras ya que hacían demasiado real.

Cuando salió de la ducha eran las 6:15. Tenía quince minutos antes de tener que irse. Después de vestirse, Seungcheol se dirigió a su Rover y se dirigió hacia la autopista. Llegó allí en cuestión de minutos, el trafico de la mañana aún no había comenzado.

El gran edificio parecía abrumador frente a él. No estaba seguro de por qué esta vez su estómago se estaba retorciendo al entrar por las puertas. Caminó a través de el innumerables veces, pero esta vez era diferente. El aire frío azotaba a su alrededor. Una secretaria de aspecto severo estaba sentada detrás de un escritorio, sin siquiera tomarse un segundo para mirar a su dirección.

Seungcheol se aclaró la garganta y llamó su atención. "Choi, aquí para ver a Chwe Hansol". Levantó una ceja dibujada a lápiz y escribió algunas cosas en su computadora.

"Al final del pasillo, tercera puerta a la derecha". Seungcheol murmuró un agradecimiento y siguió por el pasillo que señaló. Se paró frente a la puerta y se tomó unos momentos para mirar el pomo de la puerta. Dejando escapar un profundo suspiro, su pesado puño golpeó la madera de la puerta.

"Adelante." El sonido de la voz de Hansol instantáneamente hizo que su postura cambiara. Espalda recta, hombros cuadrados. La mano de Seungcheol agarró el pomo y giró, abriendo la puerta. Hansol estaba sentado en un escritorio, con gafas colocadas en su nariz, mirando la pantalla de una computadora frente a él. "Ah, Seungcheol. Por favor, entra y tome asiento ".

Asintió y cerró la puerta, sentándose en la pequeña silla frente a su comandante. "¿Hay algo que necesita, señor?"

Hansol solo le dio una pequeña sonrisa y desvió su mirada hacia el hombro de Seungcheol. "¿Cómo está tu hombro, Seungcheol? Me he puesto en contacto con su PT. Dijeron que has mejorado mucho ... que básicamente has vuelto a la normalidad ".

La mandíbula de Seungcheol se apretó un poco, pero nuevamente asintió. "Todavía se pone un poco rígido. Pero está mucho mejor ".

"Bien bien. ¿Pudiste pasar algo de tiempo con tu hermana? ¿O qué tal esa mujer misteriosa a la que amabas enviando cartas? Arqueó una ceja y cerró la parte superior de su computadora portátil, relajándose en su gran silla de cuero.

"No quiero ser grosero, pero ¿podemos saltarnos la pequeña charla? ¿Por qué me pidió que viniera ? Su voz era tensa, no estaba de humor para hablar de ti.

Hansol suelta un suspiro. "Siempre fuiste directo al grano. Es por eso que eres uno de los mejores soldados que tengo". Se movió en su silla, apoyando los codos en su escritorio. "Te dieron de alta para que volvieras a casa debido a tu lesión, Seungcheol. Esa herida ahora está curada. Puedo darte un poco más de tiempo, pero no puedes luchar contra lo inevitable ".

El cuerpo de Seungcheol estaba rígido de nuevo, esta vez una ducha caliente no iba a arreglarlo. "¿Y qué es exactamente lo inevitable?" Sabía lo que era, pero necesitaba que Hansol lo dijera. Necesitaba una confirmación exacta.