Capitulo 8

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El alfa ingresó a la habitación, se acercó a la cama y recostó al omega que tenia cargado en su hombro. Regreso sus pasos para cerrar la puerta tras de si.

—Tay estupido, toda mi cena esta en mi garganta —miro el omega con el ceño fruncido, Tay se acercó  con sigilo derrochando arrogancia en su mirada

—¿porque me miras así alfita?—pregunto confundido y con  un toque de burla

Tay no respondió mientras se acercaba a él, llegando a la cama tomo de los tobillos del menor y lo jalo hasta que este quede sentado al borde de la cama

—espérate, controla esas hormonas chiquito —reprocho con seguridad en  su voz

A la mierda la dignidad se dijo el alfa

Tay se arrodillo colocando sus codos en los muslos del menor abultando sus labios con mucha ternura

—bebé, dijiste que hoy sí —dijo en tono angelical, a veces creía que el alfa era New y no él

—no lo se Tay —respondió un poco deprimido, de verdad no sabia, tenía un poco de nervios, ansias y la vergüenza dominaba todo aquello.

—esta bien, lo siento. Cambiaré de habitación con Krist para que estés más cómodo, descansa —dijo derrotado sin poner esfuerzo en ocultarlo. Le sonrió con una notable tristeza en el gesto. No era un tonto egoísta, entendía perfectamente a su omega.

—espera... tengo una idea ... algo divertida —comento con picardía

—te escucho —llevaba semanas tratando con New y conocía a  la perfección ese tonito

—Seduceme, si logras excitarme en menos de 10 minutos ... lo haremos —dijo firme ante su propuesta, como si estuviera seguro de  ganar

—acepto bebé ¿hay alguna regla? —pregunto el alfa con atrevimiento

—no puedes tocarme —respondio New con una media sonrisa en su sonrojado rostro

—okey, empezemos lindura —cito desafiante

Tay tomo el dobladillo de su camiseta y lo levanto lentamente sabiendo que el omega recorría su torso con la mirada.

Sin pudor alguno desabrocho su pantalón y lo bajo hasta sus tobillos para luego retiralos completamente de sus piernas. Se acercó al cuello del menor y soplo provocando un cosquilleo en el cuerpo del omega.

En un susurro seductor hablo a su oido con su voz tan gruesa y varonil

—Te quiero en cuatro, ahora —sonaba  como una orden

Todo el esfuerzo puesto por New para controlarse se fueron al tacho al oír aquellas simples y descaradas palabras que desbordaban erotismo por donde sea.

Basto un segundo para que el miembro del omega despierte y su entrada humedezca por falta de atención.

—Gane bebé —coloco una mano en el abultado miembro del menor y lo apretó demostrándole asi su victoria

—estupido —dijo y dio un brinquito al sentir la mano de Tay en aquel lugar tan íntimo

New levanto sus brazos y coloco ambos en la nuca del mayor atrayendolo a su cuerpo con rapidez fundiéndose en un dulce beso del cual no faltaron lamidas y mordidas por parte de los dos, tornándose de esa forma a un beso más húmedo con chasquidos y leves gemidos.

¿ME ACEPTAS? -PerayaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora