Dulce Sonido del Dolor Vintage.

1) Flores Percudidas.

30 de agosto de 2020 – 12:37 AM.

Flores percudidas, protección desatendida, homogénea tristeza en mi alma al estar presente en el frío de tus huesos; te has de acordar que la noche es para preguntarnos la añoranza de nuestra falsa relevancia, pero aun así te extraño.

Te extraño y te necesito tan cerca como lejos mía ¿Eso tendrá un significado? No, ni tengo conocimiento de cómo mis problemas mentales se articularon a declararte a ti, en parte del todo y el nada que tengo y me falta. Imprecisa mi felicidad, te fantasea cuál ramo de tu vestido simplemente exótico, acostumbrado a estar en la vieja cafetería esperando el chocolate artesanal y el café amargo, recordando que perdemos la vida y lloramos en el mismo lugar donde dormimos.

Te sigo escribiendo en la opacidad que emite mi postrante mirar en la oscuridad del doméstico sonido seco de mi voz al recitar. Mujer, me importas tanto incluso para despreciarte y confesar que te olvidé, que te desprecio tanto que no me preocupo más por ti, puesto que te cuida un caballero motorizado, por eso perdóname.

Prometo dejar de preguntarme que es lo que hay de malo con mi persona y por qué simplemente, soy el correcto en el tiempo incorrecto. Me odio.