Dulce Sonido del Dolor Vintage.

3) Noche número 1, de 1 una noche restante.

28 de enero de 2020 – 10:50 PM.

Recuerdo la armonía de tus manos sujetando las mías, robándome en la oscuridad, volteando a una noche que era la definición de Mansedumbre; con urgencia rotaba la luna a acabar con esa vigilia. Gran luna mentirosa, me mantuvo despierto pensándote, recordando que tú acudirías a un trabajo que te va a matar.

Yo era un poeta británico, solo eras la pasión e inspiración que cabía en una canción llena de transgresiones, me tomabas encarcelándome en tus malicias, el crepúsculo era de nosotros que estábamos amarrados para arrojarnos al mar, con mi certeza de permanecer enlazados.

Aun sintiéndome desamparado recuerdo esa noche, porque en medio del gentío, no había nadie más, solo era mi mantra y el tuyo unidos por un hilo que seguía un curso para redactar sentimentalismos o afectividad. Mi voz tan estridente te reclamaba que te estaba abrazando porque ya tenía la idea de que era una de las últimas veces. Pero no fue así, la última vez, llegue cerca de tu casa a verte y uno de tus cabellos me acompaño a mi casa, la emoción melancólica de verlo me hizo lagrimear viendo el cosmos. Ese mismo día antes de despedirnos, decidí en estar decidido en esta indeciso de amarte o dejarte de amar.