Capítulo 14: Comienza el adoctrinamiento

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Al día siguiente, antes de que los discípulos partieran, Jiang FengMian expresó sus expectativas sobre ellos: "Los discípulos de la Secta YunmengJiang no son tan débiles como para romperse bajo las olas del mundo exterior".

Jiang YanLi vino a despedirlos, se quedó con ellos y les llenó los bolsillos con bocadillos. Dándoles paquetes de comida, estaba terriblemente preocupada de que una vez que estuvieran en Qishan se morirían de hambre. Le entregó a cada uno de sus hermanos bolsas de semillas de loto, "Cuídense unos a otros".

Wei Wuxian sonrió y asintió. Jiang Cheng dijo: "Sí, A-Jie".

Ambos hermanos, junto con los otros discípulos, llegaron a Qishan, en el sector del adoctrinamiento en el tiempo que se había fijado. Habían varios discípulos de otras sectas. No importaba si la secta era grande o pequeña, todos tenían que enviar gente. Todos eran jóvenes y muchos se conocían. En diferentes grupos, los jóvenes conversaron en voz baja, pero ninguno parecía estar de buen humor. Wei Wuxian miró a los jóvenes y vio a personas vestidas de blanco. Tiró de la manga de su hermano y señaló.

"GusuLan, ¿eh? Supongo que es de esperar. Trate de no causar problemas con ellos, no es momento de burlarse de ellos, ¿de acuerdo, Wei Wuxian?" Wei Wuxian asintió con la cabeza a las palabras de su hermano, pero había notado algo más: que toda la gente de GusuLan se veía pálida y agotada. Lan WangJi se veía especialmente pálido, pero aún tan helado como de costumbre. Se alejó del resto de los grupos. Wei Wuxian quería ir a ver qué había sucedido, pero no debería estar jugando, así que se contuvo.

Entonces alguien apareció ante ellos, diciéndoles que se reunieran alrededor de una plataforma alta. Algunos de los discípulos de la Secta Wen reprendieron: "¡Silencio! ¡Todos ustedes tranquilos!"

La persona que estaba en la plataforma era solo unos años mayor que ellos. Su pecho estaba inflado y orgulloso. Sus rasgos eran deficientes y apenas se cruzaban con la palabra guapo. Todo en él parecía grasiento, desde su cabello hasta su personalidad. Este era el hijo menor del Clan QishanWen, Wen Chao.

A Wen Chao le encantaba mostrar su rostro. Hizo alarde de sí mismo frente a las otras sectas en una gran cantidad de eventos. Detrás de él había dos personas, una era una mujer de figura esbelta y apariencia glamorosa; su única falla era un lunar negro sobre su labio, que se asentaba en un lugar incómodo y parecía invitar a la gente a desenterrarlo. A su derecha había un hombre alto de hombros anchos que aparentaba estar en los veinte, el aire a su alrededor era frío.

De pie muy por encima de la multitud de jóvenes cultivadores, fácilmente miró hacia abajo ante ellos. Parecía bastante satisfecho consigo mismo, agitó la mano, "Ahora, uno por uno, entreguen sus espadas".

Murmullos y charlas surgieron de la gente de abajo. Alguien protestó, "Las espadas siempre deben estar al lado de un cultivador. ¡¿Qué derecho tienes de tomar nuestras espadas?!"

Wen Chao se enfureció, "¡¿Quién dijo eso ?! ¡¿De qué secta eres?!"

El hombre que había hablado ahora tenía miedo de hacerlo. La multitud de abajo finalmente se calmó y Wen Chao estaba satisfecho. "Es precisamente por gente como tú que estoy aquí. No sabes nada de conducta, obediencia o humildad. Por eso te adoctrinaré, para que tu núcleo no se pudra. Ya eres tan audaz. Si las costumbres de los otros clanes no se enderezan, intentarán escalar por encima de la cabeza de los Wen".

Todos sabían que Wen Chao pidió sus espadas con malas intenciones. La Secta Wen era como el sol al mediodía y todas las otras sectas estaban pisando hielo que se derretía rápidamente. Nadie se atrevería a desafiar. Todos temían lo que sucedería si le causaban algún disgusto a Wen Chao, por lo que solo podían inclinar la cabeza y someterse.

Jiang Cheng sostuvo el brazo de su hermano, quien le lanzó una mirada. "No hagas nada, Wei Wuxian. ¿Ves al hombre a su lado? Ese es Wen ZhuLiu, la Mano Derrite Núcleos. Un sirviente que se mantiene al lado de Wen Chao. No lo provoques".

Wei WuXian enarcó una ceja. Jiang Cheng suspiró y explicó más: "La Mano Derrite Núcleos, se dice que tiene un poder especial y ayudó al tirano antes..."

Los dos miraron al frente mientras hablaban y cuando los sirvientes de la Secta Wen se acercaron, guardaron silencio. Con confianza, Wei Wuxian desató a Suibian y se lo entregó. Miró a su hermano que estaba pasando por lo mismo. Entonces Wei Wuxian miró a la Secta GusuLan, casi esperaba que Lan WangJi se negara a entregar a Bichen, pero cumplió. Todavía tenía una cara amarga que estaba tremendamente fría. Wei Wuxian sintió mucha pena al entregar su espada y ver a dos personas queridas que también entregaban la suya. Los dejó a todos indefensos. Si fuera solo él, no sería tan malo, su muerte significaría muy poco, pero su hermano y Lan WangJi... Eso le preocupó profundamente.

La burla que Madam Yu había hecho se convirtió en profecía. Mientras estaban siendo "adoctrinados" por la Secta Wen, la comida era terriblemente sosa. Les quitaron todos los bocadillos con los que Jiang YanLi los había enviado. Ninguno de ellos había practicado inedia. Las cosas se estaban poniendo difíciles.

Además, el llamado "adoctrinamiento" incluyó la única entrega de copias de la "Quinta esencia de la Secta Wen", que estaba llena de citas y enseñanzas de los líderes Wen y los mejores cultivadores. Todos tenían que tener uno en su persona y memorizarlos. Wen Chao de alguna manera había llegado a estar por encima de todos ellos en un solo día. Había pronunciado un discurso tras otro y exigía vítores y aplausos. Durante las cacerías nocturnas, tomaba discípulos y los hacía pararse en la línea del frente como carne de cañón. Debían hacer un reconocimiento del área, distraer a las bestias y demonios mientras que Wen Chao aparecería en el último momento y acabaría fácilmente con la presa que ya había sido debilitada por otros. Si había alguien con quien estaba disgustado, lo sacaría y lo regañaría frente a todos. Tampoco le agradaban los que lo habían humillado en la competencia de tiro con arco. Lan Xichen no estaba aquí, pero los otros tres se convirtieron en los objetivos principales a los que debía mostrar su poder.

El que más sufrió fue Jin Zixuan. Creció mimado en las manos de sus padres. Nunca había tenido que soportar tanta humillación en toda su vida. Si no fuera por los otros discípulos de LanlingJin que lo detenían y que Wen ZhuLiu no iba a ser fácil de derrotar, habría eliminado a Wen Chao el primer día; incluso si le hubiera costado la vida. Por otro lado, Lan WangJi parecía absolutamente indiferente, como si su alma ya hubiera abandonado su cuerpo. Le preocupó mucho a Wei WuXian, pero no pudo acercarse a Lan WangJi. En cuanto al abuso a Wei Wuxian, dejaría que Wen Chao dijera lo que quisiera.

Hoy, como de costumbre, el grupo fue levantado de sus camas y acorralado como ganado. Se dirigían a una cacería nocturna a un lugar llamado Montaña del Arroyo Crepuscular. Mientras se acercaban al lugar, las ramas por encima de la cabeza se volvieron más gruesas y el silencio se volvió antinatural. Cualquier grito de pájaro o zumbido de escarabajos resultaba ensordecedor. Pronto se encontraron con un arroyo gorgoteando agua con hojas de arce. Rompió la tensa atmósfera de la montaña. Se oían risas y risas delante de ellos.

Wei Wuxian y Jiang Cheng estaban insultando una y otra vez sobre los perros-Wen. Wei Wuxian volteó y vio figuras vestidas de blanco detrás de ellos, Lan WangJi. Lan WangJi se movía a un ritmo lento y estaba casi al final de la línea. Wei Wuxian quería hablar con él, pero Lan WangJi lo había estado evitando. Wei Wuxian, ahora tan cerca de él, notó que Lan WangJi estaba favoreciendo una de sus piernas. Antes de que se diera cuenta, había disminuido su velocidad hasta caminar al lado de Lan WangJi. Señaló su pierna herida, preocupado de eso.

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