Cortos lindos y tiernos sobre los hijos del Stony (Peter, Morgan, Harley) y su convivencia con los vengadores.
Los personajes no me pertenecen, solo las historias.
Créditos de la portada a su respectivo autor.
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La respuesta siempre era "no", Peter podía entender la preocupación de sus padres, pero el veía lo triste que su tío favorito se iba al no poder llevarlo con él.
Loki siempre era quien le consentía más, quien le daba los mejores regalos y le contaba las mejores historias.
-Papá, por favoooooor- suplicó el pequeño castaño poniendo esos ojitos de cachorro que derretían el corazón de cualquiera.
-No- dijo Tony de forma tajante
-Por favoooooor- volvió a insistir
Pero ni Tony o Steve darían su brazo a torcer, temían a Loki, no porque le fuera hacer algo a Peter, después de tantos años pudieron darse cuenta del enorme cariño que tenía el Dios para con su hijo, el miedo erradicaba en que, precisamente ese cariño hiciera que Loki se llevara a su hijo para siempre.
-Peter, ya hablamos de esto- Steve intentó conciliar las cosas y dar fin a esa petición que seguramente terminaría en lágrimas chantajista.
El menor salió rápidamente de la habitación de sus padres solo para correr a los brazos de su tío.
-¿Por qué lloras? ¿Quién se atrevió a herirte?- preguntaba Laufeyson totalmente alterado y abrazando fuertemente al castañito
-Mis papás... no me dejan ir contigo
El Dios de las mentiras se permitió suspirar aliviado y quizá algo decepcionado
-Sino te dejan ir, sus razones deben tener, pero no debes llorar por eso- habló acariciando los ondulados cabellos de Peter
-Es que te vas triste y yo no quiero que estés triste- el hijo del matrimonio Stark Rogers levantó la carita roja y llena de lágrimas
Loki sintió unas tremendas ganas de mimarlo y encerrarlo en una burbuja para que nada malo le sucediera
-No llores, vendré el próximo mes
-Quedate- pidió
-No puedo, tengo asuntos que arreglar en Asgard, pero en cuanto termine, vendré y te traeré muchos regalos
-No quiero regalos, quiero que todas las noches me cuentes como molestabas al tío Thor
El resto del equipo miraba la tierna escena, Peter siempre les hacía sacar su lado más tierno
Tony y Steve suspiraron al verse como los malos de la película, sus miradas se cruzaron con los ojos verdes de Laufeyson
-El lunes debe estar aquí- sentenció Steve tomando fuertemente la cintura de su esposo
El pequeño Peter chilló de emoción aferrándose cual koala a su tío
Loki le cargó como lo hacía desde hace tantos años, solo Peter le hacía sacar ese lado tierno y cariñoso que tanto se esmeraba por esconder.
