30 DÍAS - Nefita Month

3-CON ANTEOJOS

NEFITA-CHAN MONTH 

3-CON ANTEOJOS. 

Eres la luz que ilumina mi vida y eso de que me sirve si no te puedo apreciar bien. 

No le agrada la idea, sabe que su visión no es buena, más bien es pésima, pero odiaba usar lentes, era algo que no iba con ella, aun aguantaba los lentes de sol, pero los de aumento no ¡Jamás! 

Por eso cuando su novio empezó a insistir que debía darle una oportunidad a los lentes, desecho la idea de inmediato, no quería y punto. Pero su visión empeoró un poco más, afectando a tal punto de que se tropezaba con cualquier cosa, porque no veía las cosa simples que estaban a su alrededor. Ese fue el colmo para su pareja, le preocupaba verla así, por eso no le dejó de insistir hasta que aceptó, nadie es más terco que él, solo ella… aveces. 

Se a llegado el día y no quiere ir. 

Sabía que estaba haciendo una rabieta pero la idea de ir con el oftalmólogo no le entusiasmaba mucho, si no todo lo contrario. 

-Vamos chiqui, es por tu bien. - le decía divertido su novio, por las caras raras que hacía la chica. 

-No quiero ir cariño. - dice mirándolo a los ojos con un tierno puchero. 

-No me mires así Nefita, esta vez no voy a ceder, me preocupa que tu ceguera vaya en aumento. - le negó  haciendo uso de mucha fuerza de voluntad, los ojitos de su novia eran una de sus debilidades. 

-Ya no verás mis tiernos ojos directamente, ahora será detrás de un horrible cristal. - seguia intentando convencer a su novio. 

-Ya he dicho que no hay pero que valga, además tú con lo que te pongas te ves hermosa. - Le da un tierno beso en sus labios. 

-mm… - sabe que ha perdido la batalla, pero por más besos así valía mucho la pena, no podía resistirse a esos besos. 

-Ven chiqui es hora de irnos. - Toma la mano de su chica y se la lleva, sabe que por el momento le ha ganado a su fiera, pero aún no es hora de cantar victoria. 

2 HORAS DESPUÉS 

No le gusta como se ve con lentes, se ve  y se siente rara, no quiere que Vege la mire así, pero conoce como es su novio no la dejara tranquila hasta que la vea con ellos puestos, se mira por última vez en el espejo y aunque se intente convencer que se ve bien pero eso no pasa. 

Sale de ahí en busca de su novio, lo ve sentado en una banca frente al establecimiento esperándola, en cuanto la ve se levanta y va dispuesto a encontrarla. 

-Nefa, Nefita, Nefa, Nefita. - se acerca feliz cantando su nombre. - que bonita te vez con tus lentes nuevos. 

-Samu no digas mentiras. - dice muy avergonzada. 

-Porque diría mentiras, si tengo a la novia más bonita del mundo. - le dice mientras le da un beso en los labios.- todo lo que tu usas me encanta chiqui. 

-Amore mío, eres un trocito de cielo. - mira con ternura a su hombre. ¡Como lo ama! 

Tenía que admitir que los lentes si le ayudaban mucho, ahora podía apreciar mucho mejor las facciones, gestos, reacciones, absolutamente todo de su novio y eso le encantaba.