One shots - JENLISA +18

Secretos

La música sonaba demasiado fuerte en los altavoces de la casa de al frente, llame a la policía y lo único que me dijeron es

-"señorita , es una fiesta en un fin de semana, relájese y diviertase. Nosotros tenemos mejores cosas que hacer, si va a llamar que sea por un robo a un banco o algo mas, no por una fiesta que supongo usted quiere unirse, disfrute y no vuelva a molestar"-

Como buena ciudadana les dije su vida cuando colgué el teléfono, lo que menos quería es salir en el periódico y que lleve como titulo "loca amenaza a policías por llamada telefónica" mi padre no me lo perdonaría y mi madre, bueno debe estar de viaje hacia la graduación de mi hermano, un gran éxito para él.

Un sonido en la puerta me saco de mis pensamientos, salte en el lugar donde estaba, mi cuerpo tembló ante la sensación de que seria mi ultimo día y solo tal ves mi ultima oportunidad de lograr las cosas que tanto quería, y que mi vida fue tan aburrida que esto era un cuento de mal chiste quería llorar y gritar, lo único que tenia en mente era llamar a la policía pero no responderían, cada fin de semana era lo mismo.

Lisa Manoban realizaba una fiesta hasta que el ùltimo invitado no recordara su nombre, situación graciosa porque cada vez que la veía sentía algo raro, como si en su mente pasara una escena donde yo era el mártir o solo eran cosas mías, y la verdad era otra.

Algo que no quería averiguar por el temor de las respuestas que pueda encontrar.

Una pequeña posibilidad de que no era el mártir, no en el sentido de matarme a golpes sino a orgasmos. La fama de ella se basa en esto, es una fiera en la cama pero con una actitud de niña buena ante los demás.

Personalidad que lograba comprar a muchos.

Mujer sin sentimientos, para otros gran amiga, compañera y buena amante, lo ultimo no lo creía, siempre me repetía lo mismo, no lo podía comprobar y tampoco tenia la intención de hacerlo, tal vez por el miedo o la forma en como me educaron mis padres.

Este pensamiento lo tomaria en cuenta si fuera de meses atras, ahora la situaciòn era distinta.

Unos brazos acogedores reposaban alrededor de mi cintura, mientras delicadas manos dibujaban cosas sin sentido por encima de mi pijama, sabia quien era, en los últimos meses era así, ella armaba sus fiestas, yo llamaba a la policía y ella venia a mi habitación.

Encuentros puramente sexuales, en la calle éramos desconocidas pero bajo mi cuarto en estas cuatro paredes la situación era distinta.

Si mi cuarto hablara diria las veces que Lisa entro por mi puerta solo para pasar conmigo la noche estando entre mis piernas.

- Estabas preciosa hoy, no sabes las ganas que tenia de comerte, esa falda iba ser victima de mi rudeza, no sabes como mi mente paso imágenes muy inapropiadas de como seria tenerte debajo de mi mientras lo usabas, es un pecado llevar diminuta prenda pero mas me molesto que todos te miraban a ti, eres mía. Mia. - un gemido resonó en la habitación, mis mejillas se calentaron, solo ella provocaba eso, ni siquiera mi exnovio.

No sabia si me deba considerar como suya.

Nuestra relación no lleva un titulo ante la sociedad, inclusive puedo decir que para ellos ni siquiera nos hablamos.

-Vete, tienes que ser anfitriona de tu fiesta.- Debía poner un fin a esta situación, se me escapaba de las manos, siempre era así, doblegaba mi sensatez y pudor.

-Tengo mejores planes y créeme involucra menos ropa y mas danza en la pasión en una cama donde tu y yo seremos los protagonistas.-Mi corazón latía demasiado rápido, esto estaba mal, se iba a comprometer y yo aquí recibiendo lo poco que me podía dar, algunas lagrimas querían salir, me mantuve fuerte, no quería que me viera así.