Deuce siempre tuvo una gran afinidad y talento para la cocina. Era algo que amaba hacer, lo que más le gustaba era preparar postres salados de uvas, los favoritos de Cleo, su novia. Amaba cocinar para ella, en especial la parte en donde su novia probaba sus creaciones, todo era recompensado al ver sus orbes brillantes destilantes de amor hacia él y el escucharla decir que era lo mejor que había probado, aunque fuera la decimosexta vez que lo decía, nunca se cansaba de ello. Pero nunca se imagino que ella, Cleo, su rayo de sol, le exigiera una clase de cocina, con la excusa de querer prepararle un pastel en agradecimiento por sus postres.
Y el no se negó, al contrario, disfruto cada maldito segundo, el poder ver a Cleo fuera de su zona de confort, era algo que le fascinaba, por que era el momento en el que ella se olvidaba de todo, de su estatus, de su padre, de su hermana, del que diran.
Y solo entonces era Cleo, su Cleo, una chica ordinaria, la chica de la cual se enamoró.
Oh, pero no todo era miel sobre ojuelas, siempre olvidaba ese pequeño e insignificante detalle, el que Cleo no supiera diferenciar de las pociones mágicas de su padre a los ingredientes de cocina.
Si, obvio que termino mal, pero ¿ERA NECESARIO LLEGAR HASTA AL PUNTO DE VOLVERLO TRANSPARENTE? Técnicamente no era transparente, era invisible, como invisibily boy, pero vaya suerte que tenía el tipo, no se quejaba, por que podía ver a su novia lloriquear por toda la cocina pidiéndole perdón.
Si era un maldito hijo de perra, pero, era muy divertido ver a Cleo tratando de hablar con el horno.Bien, ya habiendo disfrutado lo suficiente del sufrimiento de su novia, decidió poner fin a su miseria.
— Hey Nena, aquí estoy.– dijo por fin, tirando la batidora para llamar la atención de la ojizarca.
La egipcia al escuchar la voz de su novio, detuvo sus pasos y regreso hacia la isla de la cocina, afinando el oído para escuchar a su novio.
—¿Deucey, donde estas?.– se agacho a recoger el instrumento de cocina.
—Justo aquí, buhhh.– el chico gorgona enrollo sus largos dedos en la cintura de la chica.
—AHHHHH, maldito seas Deuce, no es divertido, no puedo verte.– grito mientras hacía un puchero.
—Pero puedes sentirme, ¿No es así?.– sonrió él ahora invisible chico gorgona.
—Supongo, pero debes comportarte, por ahora solo dame la mano y no te sueltes, vamos a buscar en el cuarto de pociones de papá.– Cleo se había quedado esperando a que Deuce tomara su mano, pues aunque no podía verlo, sentía el calor que emitía su cuerpo y escuchaba el sisear de los reptiles en su cresta.
—Vaya, al parecer ahora tú tienes las riendas de la relación.- risas burlonas se escuchaban por la cocina de la egipcia.
—Ríete lo que quieras, pero te aviso, que si encontramos la poción reversible, no volverás a la normalidad y yo no quiero un novio invisible, ya hay uno en la escuela.– habló con tono travieso la azabache.
El chico gorgona dejó de reírse y se apresuró a tomar la mano de su novia y arrastrarla a la planta alta de la pirámide de Ramses. Una vez que estuvieron frente a la puerta, Cleo abrió la puerta.
—Bien, ahora a buscar la poción, si no mal recuerdo, es de color rojo y tiene tapa aguamarina.– dicho eso, ambos mounstros empezaron a buscar la dichosa poción. Subían a los estantes y revisaban las repisas más arcaicas del recinto. Subían escaleras y bajaban con cuanto amuleto y poción egipcia encontraban.
—¿Hallaste algo Deucey?.– la egipcia se miraba preocupada y hasta cierto punto desesperada hasta el punto de quitarse sus ahneladas plataformas y correr descalza por el recinto arenoso.
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La 𝐎𝐃𝐈𝐒𝐄𝐀 de 𝔇𝔢𝔲𝔠𝔢 𝔊𝔬𝔯𝔤𝔬𝔫 por 𝐂𝐋𝐄𝐎 𝐃𝐄𝐍𝐈𝐋𝐄
Romans______________{🎭𝑰 𝒍𝒐𝒗𝒆 𝑫𝒆𝒖𝒄𝒆𝒚🔗}__________ ...💌... 🖇¿𝘊𝘰𝘯𝘰𝘤𝘦𝘴 𝘢 𝘭𝘢 𝘵𝘢𝘯 𝘢𝘧𝘢𝘮𝘢𝘥𝘢 𝘱𝘢𝘳𝘦𝘫𝘢 𝘳𝘦𝘢𝘭 𝘥𝘦 𝘔𝘰𝘯𝘴𝘵𝘦𝘳 𝘏𝘪𝘨𝘩? 🖇¿𝘕𝘰? 🍱𝘗𝘶𝘦�...