Sus ojos miraban atónitos la escena frente a él, lloraba y gritaba su nombre tratando de inútilmente traerlo, pero ya era tarde.
El cuerpo yacía sin vida sobre aquella cama, era la prueba de ello, acurrucado como si hubiera tenido demasiado frío y entre sus manos acurrucadas contra su pecho, yacia una pequeña prenda agua marina, sus gritos destrozados se escuchaban en todo aquel que fue su hogar, siendo sacado a la fuerza por parte de aquellos que fueron sus suegros.
</3
El Omega lloraba al leer la carta que había encontrado de su amado completamente roto, aquellas palabras escritas habían logrado clavarse en su corazón, se arrepentía de lo que había hecho. Lloraba junto a la cama leyendo aquel diario, había lastimado a quien prometió jamás hacerle daño, había roto su corazón de la forma más dolorosa, lloraba por haber apagado aquella linda sonrisa tan tierna, odiaba haber apagado a su amado alfa.
Pero llorar no traería a la vuelta a ese ser que ahora brillaba resplandeciente junto a su pequeño cachorro, Jimin se había dado cuenta muy tarde de que nunca había dejado de amarlo, de que estaba enamorado de él.
"Y nuestras almas bailarán juntas bajo la luz resplandeciente de la luna, admirando a nuestro pequeño destello de estrella brillar en lo más alto, porque tú eres yo y yo soy tú, juntos hasta el fin de las galaxias"
