･ﾟ✧𝙃𝙞𝙟𝙤𝙨 𝙙𝙚𝙡 𝙁𝙪𝙩𝙪𝙧𝙤✧ﾟ･ [TERMINADA]

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐢𝐧𝐭𝐚 𝐲 𝐂𝐢𝐧𝐜𝐨 𝟑𝟓

Autor POV

- ¿Y ahora? - preguntó Miguel mirando a Henri mientras le ponía un vendaje en el corte que había dejado de sangrar.

- Tenemos que volver, estoy perdiendo mis poderes, pronto tú y las gemelas también. - dijo Henri y miró a Miguel preocupado.

- ¿Qué? ¿Me quedaré sin poderes de hombre lobo y me convertiré en humano para siempre? - preguntó Miguel desesperado, ¿cómo protegería y cuidaría a su hermana ahora?

- No para siempre, mientras que estemos aquí y no nos vayamos a quedar hasta que seamos humanos o despareceremos - dijo Henri levantándose con la mano en el brazalete. - ¡Tenemos que hablar con las gemelas y volver a casa!

- Mis padres aún no están en pareja, ¡debemos asegurarnos de que estén juntos! - dijo Manuela mirando a Henri quien suspiró frotándose la cara.

- Está bien, esperemos a que lleguen y luego nos vamos, ¿vale? - preguntó Henri mirando a los dos que asintieron. - Intentemos hablar con las gemelas y decirles que nos vamos hoy.

- ¿Qué les vamos a decir a nuestros padres? - preguntó Miguel mirando a Manuela y Henri, no habían pensado en eso y sus padres en el futuro no hablaron de eso.

- El tío Deaton dijo que no dijera la verdad o el plan no funcionaría. - dijo Henri mirándolos.

- ¿Dejamos un mensaje? - preguntó Manuela confundida mirándolos y Henri se encogió de hombros, no tenía ni idea de lo que les dirían.

- ¡Lo pensaremos más tarde! - dijo Henri y asintieron, aún tenía que saber cómo estaban los gemelos.

Mientras Henri pensaba con Manuela y Miguel sobre lo que les dirían a sus padres y trataba de hablar con Ayla y Aisha, en la cabaña a kilómetros de distancia, Stiles se despertó con el ruido de los pájaros. Se estiró en la cama y se volvió hacia un lado buscando a Derek pero no lo encontró, frunció el ceño preguntándose dónde estaba y se dio cuenta de que todavía estaba desnudo. Después de quedarse dormido el día anterior, durmió como una piedra, ya que desde que Manuela se enfermó aún no había recuperado el sueño perdido, Stiles se levantó y fue al baño de la habitación, se metió en la ducha y abrió la perilla del agua, empezando su baño.

Cuando terminó, hizo su higiene bucal y salió del baño con la toalla envuelta alrededor de su cintura, dirigiéndose a la bolsa que tenía su ropa puesta. Mientras se vestía notó varias marcas en el cuerpo que Derek había dejado, su trasero estaba muy adolorido por la bofetada que le habían dado pero le recordaba las palabras que habían intercambiado antes que la sesión de sexo comenzará.

Salió de la habitación y se dirigió a la cocina para encontrar a Derek poniendo la mesa, al notó su presencia se giró y lo miró sonriendo. Se había despertado hace un tiempo y decidió hacer su desayuno, cuando vio que Stiles estaba demasiado cansado como para despertarse, termino de poner la comida en la mesa, se acercó al más joven y lo besó tomándolo de la cintura.

- Buen día. - Dijo Derek cuando detuvo el beso y miró a Stiles quien sonrió.

- Buen día. ¿Es todo esto para mí? - preguntó Stiles y miró a la mesa escuchando el gruñido de la barriga mirando los panqueques que se veían deliciosos.

- No te acostumbres. - Dijo Derek tirando de la mano de Stiles hacia la mesa y se rió sentándose.

- Demasiado tarde. - dijo Stiles encogiéndose de hombros y Derek sonrió, no tendría ningún problema en hacer eso todos los días si fuera por él.

- Hablé con Peter esta mañana. - Dijo Derek mirando a Stiles que se comió el panqueque.

- Entonces, ¿los niños están bien? - preguntó Stiles mirándolo y puso un trozo de panqueque en su boca.