Dulce Venganza

#03

Actualmente.

Despertó por el fuerte golpe en su mejilla, no se había repuesto de este cuando ya estaba recibido uno más fuerte del otro lado de su rostro.

- ¿Qué mierda? - dijo, siendo interrumpido por otro golpe en su estomago sacando le el aire.

- Sin malas palabras, Jongsuk - dijo la castaña, sosteniendo el bate con el que golpeo al pelinegro.

- Jennie, maldición. ¡ACASO HAS PERDIDO LA CABEZA! - dijo después de respirar. La castaña volvió a golpearlo tomándolo por el cabello y halar lo para que la mirara.

- Dije: sin malas palabras, Jongsuk - la castaña cambio su cara de amabilidad por una seria y sin emociones.

- ¿Qué piensas hacer, Jennie? Ha, sonreírme con esa bonita boca que tienes - El chico recibió otro golpe, pero esta vez fue dado con una de las puntas del bate que la chica sostenía.

- Obviamente no, Jongsuk. Pienso hacer más, solo debes tener paciencia-

- Admito que tienes agallas, ¿A qué se debe tu repentino toque de valor? Apuesto que no harías mucho si yo no estuviera atado en esta silla- Esta vez el golpe fue a parar a una de sus costillas, siseando debido al dolor.

- Las tengo - con su mano volvió a halar el cabello del chico- deberías de ver de lo que soy capaz-

- Debo admitir que me encanta esta tú - dijo él - me prende más que aquella chica joven y risueña de hace unos meses atrás - sonrió, por haber causado aquel efecto en la chica. El miedo en los ojos de Jennie lo hizo sentir mejor. Por el momento.

- Eres un maldito hijo de puta - escupió la castaña mientras se incorporaba correctamente y arremetía fuertemente contra el chico - ¿CÓMO PUDISTE? ¡MALDICIÓN! ¿CÓMO PUDISTE HACERLE ESO? ¡ELLA ERA MÁS JOVEN, ELLA ERA MÁS DÉBIL! -

- ¿De qué hablas? - pudo decir él, cuando la chica dejo de golpearlo cayendo al suelo sobre sus rodillas, la sangre manchaba su ropa, incluso la alfombra del cuarto ya tenía un poco.

- ¿Acaso se te olvido su nombre, Jongsuk? - Pregunto con ira - pues yo te haré recordar el nombre de Jisoo - se levanto y lanzo uno de los jarrones del cuarto en el suelo, recogiendo uno de los pedazos y clavándolo en el brazo del pelinegro.

Grito, tan desgarrador fue que incluso a Jennie le entro un poco de arrepentimiento, hasta que el rostro de Jisoo paso por su mente, solo con eso clavo más el cristal.

- La violaste, abusaste de ella. Eres tan repugnante, tan asqueroso. ¿Cómo pudiste hacerlo?-

- Lo hice, al igual que lo hice contigo. Al igual que con las demás, ¿Y sabes qué? - Dijo, escupiendo en el suelo un poco de sangre - No me arrepiento de nada -

- ¿Las demás? ¿Violaste a más chicas? -

- ¿Qué? ¿Creíste que eras la única? La verdad no eres tan especial, Jennie. Aunque si fuiste una de mis favoritas -

- ¡MALDITO! - Grito - ¡MALDITO! ¡MALDITO! - Jennie grito mientras agarraba otro trozo de vidrio y lo clavaba en el brazo del chico. - ERES UN MALDITO, POR TU CULPA JISOO SE QUITO LA VIDA, POR TU CULPA YO LA VI MORIR -

3 meses atrás.

La gente se encontraba angustiada alrededor del edificio, el ruido de los carros, la ambulancia la sirena tanto de los policías como bomberos, tenían a más de uno con los nervios a flor de piel. Todos susurraban, otros se mantenían en silencio, mientras otros eran esos que grababan lo sucedido para subirlo a Internet.

Los empleados del hotel se movían de un lado a otro para salir del lugar, y los bomberos hacían su mejor trabajo para desalojar el edificio y poder ir a socorrer a la muchacha. Jennie se encontraba de camino a la azotea, subió al ascensor a penas supo lo que pasaba, y luego tomo las pocas escaleras que faltaban para llegar a su destino.