-Más que Amigos- //Kunessi//

3- Sentimientos

[Continuamos... ]

Narra L.Messi

Sentí unos manos suaves que acariciaban mi cara y a la vez escuchaba la dulce voz, abrí mis ojos para ver a quién yo creía sería un ángel, pero quién estaba al frente mío era alguien mucho mejor que un ángel, era Agüero.

— Leo, ¿qué haces sentado en el piso?— su tonó era tan dulce me dejo hipnotizado. — ¿Leo?—.

No sabía que decir, solo quería que sus manos siguieran acariciando mi cara mientras veía sus hermosos ojos cafés.

—Leo... — se agacho a la altura que Messi se encontraba sentado en el piso. — Tenemos que ir a entrenar—.

No escuche lo que me dijo solo veía sus labios moverse de una manera que me atrapaba, las ganas de besarlo no salían de mi cabeza.. ¿Pero solo es mi amigo?

— ¡Leo!— empezó a sacar sus manos de la cara de su amigo para levantarse del piso. — No creo que te encuentres bie- lo interrumpí.

Narro yo

Por fin Messi sacaría esas ganas que carcomían su corazón.

Cuando sintió que el Kun sacaba sus manos, despertó en un ágil movimiento agarrando los brazos de su amigo y empujarlo contra él, terminando con la poca distancia que quedaba entre ellos.

Aunque el Kun bastante sorprendido de cualquier forma correspondió al beso, ambos estaban atrapados en un beso lleno de pasión y deseo.

Los dos esperaban éste momento con todas sus fuerzas, no se acabaría ahí en, un simple beso.

Messi bajo sus labios hasta el cuello de su acompañante, lo único que hacía Agüero era rodear suavemente sus brazos en el cuello de Messi, y soltar de su boca suspiros y leves gemidos.

Pasaron por lo menos 2 minutos así, pero las cosas escalaban muy rápido, por el deseo que claramente tenían los dos por el contrarió.. Ambos desvestían al otro para poder quedar ambos con escaza ropa.

Agüero se encontraba recostado en su cama mientras que Leo abrió sus piernas, lentamente bajo su calzoncillo para hacerle lo que muchos ya saben que harán.

*Toc Toc*

Tras esos golpes ambos miraron a la puerta con miedo a que la abrieran, Lionel miro devuelta a su acompañante para darse cuenta de que este ya no estaba.

¿Dónde se fue? Muy fácil ya que voltió devuelta y vió como la puerta del baño se cerraba bastante deprisa.

Se colocó sus pantalones y fue a abrir la puerta mientras maldecida a cualquiera que hubiera tocado la puerta por interrumpir el momento que fantaseaba en sus sueños.

*abre la puerta*

—¡Buenos días, Leo!— saludo Giovanni, mientras él hablaba, no sabe las mil cosas horribles que Messi le deseaba en su cabeza. —Tenemos que ir a entrenar mañana es el gran partido contra Colombia— recordó Gio.

—Sí, sí, ya voy.. — en su voz se podía notar el tonó enojado y rencoroso que tenía. —También le avisaré al Kun— comentó para luego querer cerrar la puerta.

—Dale, pero vengan rápido antes de que todos los asientos estén ocupados— su intención era solo avisar sin saber todo lo que arruino. — ¡Nos vemos!— se despidió Gio alegremente.

—Nos vemos.. — devolvió la despedida intentando ocultar el tonó de rencor.

Apenas vió a Giovanni irse, hasta no ver más su silueta, cerró la puerta para ver a su "amigo".

Narra S.Agüero

Cuando me encerré en el baño escuche como Messi hablaba con alguien, aunque la verdad eso por ahora no me importaba.

Me mire al espejo y mi cara estaba roja y a mi cuello le empezaban a salir unas manchas raras pero como son pequeñas no creo que sea nada malo...

Empecé a pensar en que hubiera pasado si no nos hubieran interrumpido. ¿Lo abríamos hecho?

¡¿Casi tengo sexo con mi mejor amigo que me esta pasando?! ¡¿Por qué ahora tengo ganas de tener sexo con Leo ahora?!

¿Acaso es normal tener pensamientos así después de lo que pasó?

Narro yo

Agüero se ahogaba en un vaso de agua mientras que Messi se a dado cuenta de sus sentimientos hacia su amigo, después de lo que pasó no podría seguir negándolo, sería estúpido hacerlo.

La pulga estaba por tocar la puerta del baño hasta que se puso a pensar en que su pobre Kun estaría atormentado por los mismos pensamientos que él.

¿Tenía que ayudarlo o simplemente dejarlo ahí?

Narra L.Messi

Mi decisión estaba ya elegida al escuchar sollozos que venían del baño.

*Toc Toc*

—Kun, perdón por lo que pasó.. — en éste momento me sentía culpable, ya que por mi culpa la persona que más amo estaba llorando. —Necesitamos hablar—.

—N-no quiero h-hablar ahora— mumuro entre sollozos el Kun, al otro lado de la puerta.

—Está bien, pero recuerda que tenemos que ir entrenar— mi voz empezaba a quebrarse, me dolía escuchar al Kun llorar. —Espero que vayas y me perdones—.

Preferí no molestarlo e irme a entrenar, supongo que ahí le podré explicar todo...

Continuara...

[Perdón por no actualizar, no voy a intentar escusas la verdad es que no tenia ideas pero bueno estoy devuelta. Gracias por leer ❤]