Enamorándome de tu inocencia: historia de amor entre un ángel y una demonio.

El inicio del destino fatal

-Richard ¿Por qué la primera vez que te vi tenias los ojos azules? Ahora son verdes...- soltó de repente la pregunta.

-¿Tu me ves los ojos verdes?- Le dijo sorprendido- Pensé que todos los veían azules-

-No entiendo...-

-mira- tomo el celular, se acerco a ella, la abrazo y se tomo una selfie- por esto lo digo- en la foto se veía el con los ojos azules.

Ella quedó sorprendida ¿Qué estaba pasando?

-El otro a ti se te colocaron rojos....- La había atrapado- además de que por alguna razón ahora tu aroma es dulce y antes frutal-

-pasó lo mismo contigo-

-exacto-

Se quedaron en silencio.

-Yo creo que no deberíamos preguntarnos nada más por ahora...-

Y así quedo la conversación ese día.

Paola le daba vueltas y vueltas pero no encontraba explicación, el no parecía un demonio, pero si un humano ¿Entonces como era posible eso?

Richard también le daba vueltas al asunto. Ojos rojos cuando estaba muy emocionada y normal son cafés. Definitivamente no era un ángel pues ellos nunca habían tenido los ojos de ese color. Tenia que investigar. Entonces se fue a su casa, abrió el closet, presiono algo y se abrió una puerta. Era el pasadizo al paraíso. Entró sigilosamente para ir a la biblioteca.

Caminó hasta el jardín principal de su casa. Allí estaba su madre. Ella lo felicito por su cumpleaños alegremente y lo abrazó.

-Hijo hueles raro- le dijo de repente- hasta tu presencia es extraña-

-mamá....que dices....-

-Bueno dejémoslo así. Tu papá esta en el estudio ve a saludarlo-

Le indico que si con la cabeza pero primero fue al baño de su cuarto y se bañó. No entendía porque su madre decía que su aroma había cambiado.

-hola papá-

-hijo- le dio un abrazo- ya eres un adulto-

-si señor-

-estás raro ¿Pasó algo?-

-No nada....-

Le explico que no era nada, que quería ir a leer un rato a la biblioteca celestial y este le dijo que fuera en su auto. Este le hizo caso y se dirigió allí.

La gran biblioteca estaba rodeada de un hermoso jardín, en este los ángeles podían conversar y comer algo. El sonreía al recordar que mayor parte de su infancia la tuvo ahí, entre los libros.

Fue hacia la sección de orígenes. Busco ojos rojos.

"Se dice que en los humanos se extinguieron a causa de rumores en la edad media humana. También se pueden encontrar como un gen recesivo.

Pertenece a una clase muy antigua de demonios"

-demonios.... No puede ser....-

- ¿Sería ella un demonio? ¡No podía ser! Era mas bien una humana con algunos trucos mágicos- pensaba intranquilo-tengo que volver-

Se fue directo a casa y pasó el portal.

El timbre de su celular sonó.

-Hola ratoncito ¿Cómo vas?-

-bien...¿Puedo ir a tu casa?-

-Si claro....-

-indicame tu dirección-