Una magnífica noche donde se conocen, siete años después se celebra una boda. Dos enamorados y un corazón roto.
"Nunca estarás satisfecho"... Él tenía tanta razón.
─⊱✿⊰Capítulo único+extras
─⊱✿⊰Los personajes de la historia no pertenecen créditos...
Nota: Aquí Jingyi es hijo de Meng Yao (este ya se encuentra muerto)
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Lan Sizhui y Meng Jingyi se estaban casando. Las familias Jin, Lan, Nie, Wen y Jiang asistieron a la boda. Todos estaban contentos por el lindo matrimonio de los dos chicos, sin duda serían una feliz pareja. Dentro de todo ese ambiente festivo había una persona que debía ocultar el dolor que sentía, ya que su gran amor se casaría, Jin Ling estaba devastado... Jingyi se casaría...
—Muy bien, muy bien. Ahora todos, un aplauso para el caballero de honor: ¡Jin Rulan!— mencionó Ouyang Zizhen con gran entusiasmo.
—¡Un brindis por el novio, Jingyi!— Jin Ling alzó su copa, aparentaba una sonrisa en su rostro, si tan solo él fuera quién estuviera a su lado.
—¡Por el novio, Jingyi! — gritaron con gran alegría los demás invitados.
—¡Por el novio, Sizhui!— ahí estaba aquel afortunado que se había robado el corazón de su primer y único amor— De parte de su primo, que a su lado siempre está... Su unión nos inspira y nos da esperanza—claro, las esperanzas para Jin Ling se habían acabado desde hace mucho tiempo desde que su primo y Jingyi habían anunciado su compromiso— ¡Que por siempre estén satisfechos!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Siete años antes.
Aún recuerda esa noche, pueda que se arrepienta el resto de su vida. Recuerda a esos jóvenes tratando de ganar sus halagos, señoritas y jóvenes querían llamar la atención de Sizhui y Jin Ling...
Pero Sizhui ya tenía sus ojos puestos en alguien, en aquella persona que estaba parada en las escaleras... Fue cuando Jin Ling lo miró por primera vez.
—¿Por qué no le vas a hablar?— dijo con ironía Jin Rulan, creyó que solamente era algo pasajero de su primo.
—No... Me da pena—un sonrojo se formó en las mejillas del más alto
—Entonces iré yo, te ayudaré— antes de marcharse dio una última palabra a su primo— Me debes una
Jin Ling aún recordaba que la luz de las velas eran de ensueño, como un sueño que no puedes recordar del todo, tan irreal; la música clásica que estaba acompañada con los murmullos de las personas. Solo había una cosa que no podría olvidar y ese era el rostro de Jingyi. No había vuelto a ser el mismo, ese ser tenía ojos inteligentes en un cuerpo con hambre.