Capitulo 1

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CAPÍTULO 1

Maggie

Éramos solo tres 3 chicas.. con tan solo 19 años En una sala de espera, enfrente de la oficina del psicólogo, el Dr Mark... Estábamos tristes por lo que nos había sucedido hace tan solo un para de días ... Solo eramos nosotras contra el cruel mundo.. Lu miraba una revista y mientras tanto Alaska escuchaba música con los ojos cerrados y yo miraba el suelo algo deprimida, nunca fuimos personas de tener muchos sentimientos, pero esto, esto sí nos dolió.

Seguíamos en silencio hasta que escuchamos una puerta y las tres levantamos la mirada..

- Chicas.. Pueden pasar con el Dr. Mark- dijo la secretaria con una sonrisa que podría poner de buenas a cualquiera, excepto a nosotras.....

Le toqué el hombro a Alaska ya que no escuchó, nos levantamos del sillón y nos acercamos a la oficina

- Bienvenidas Chicas!- dijo el Dr. con un entusiasmo increíble, lo miramos incrédulas- Pasen y tomen asiento- dijo mientras dejo una hoja sobre la mesa y se quitó sus gafas.

- Se lo que les a pasado, pero quiero escuchar sus versiones, así que, Lu y Maggie, les pediré que se retiren para que pueda hablar con Alaska

" __cpp="1">Alaska nos miró de forma "¡no me dejen aquí!" pero Lu y yo notamos que el Dr. nos decía lo contrario con sus ojos. Así que decidimos dejarlos

-Bien- dije algo preocupada

Lu y yo nos quedamos platicando, platicamos sobre lo típico, nada que tuviera que ver con lo que paso, aun no estábamos listas para hablar de eso entre nosotras; tiempo después, vimos salir a Alaska llorando, no lo pensamos dos veces y Lu y yo la fuimos a abrazar inmediatamente, el doctor nos veía con una sonrisa

-Sigues tu Lu

Nos vio con una cara de que la ayudaramos, Alaska iba a ir en su ayuda, pero la tome del brazo y la detuve

- ¿Qué demonios fue lo que te pregunto?- le dije viéndola, ella no me podía ver, no me había visto a los ojos desde ese día

-Me preguntó qué les pasó, y yo le dije, después me hizo algo raro, me durmió o algo, de eso no recuerdo nada, solo recuerdo despertar llorando

Charlamos un poco hasta que llegó mi turno, la verdad no quería entrar, tenía miedo de lo que fuera hacer adentro.. Algo parecía estar mal. Sin importar que vi que mis amigas si tuvieron el valor de entrar asi que decidi hacer lo mismo que ellas.

Entre y comenzamos a hablar acerca de lo sucedido y quién era yo, en verdad me sentía bien al inicio pues me desahogaba.

-Muy bien entonces ¿quienes eran tus familiares?- dijo mientras buscaba algo en un cajón de su escritorio

-Pues.. Casi nadie sabía pero mis papás eran.. ESPERE!! ¿Busca algo?- dije dudando de que hacía el Dr.

El doctor no reaccionó hasta después..

-¿Perdón?- dijo levantándose a buscar en su escritorio

-¿Que si busca algo?- dije algo temerosa

-Ahh no Cariño por mi no te angusties, Entonces.. ¿¿Tus papas que dices que eran??- dijo sentándose y escondiendo algo detrás de sus manos

- Bueno mis papás eran millonarios- dije murmurando

-¿Y crees que tus papás hayan muerto por culpa de su dinero?- dijo mientras se volvía a levantar de su asiento pero esta vez de fue hacia un mueble en el que tenía medicinas.

-No.. No me gusta hablar de eso...- dije levantándome lentamente de la silla para acercarme a la puerta y salir de allí.

-¿A donde vas Maggie?- dijo mirándome desde el espejo frente a él

-Yo.. No...- dije tartamudeando

Yo no confiaba mucho en él pues parecía un adolescente, luego me di cuenta que su barba falsa comenzó a caerse.

El chico que resultaba ser Doctor se quitó la barba y dijo

-Lo lamento tanto- mientras se acercaba lentamente a mi y yo trataba de alejarme y abrir la puerta pero tenía seguro- Pero.. No recordaras nada de lo que acaba de pasar a igual que tus tontas amigas-

En ese momento tomó mi mano y me aventó contra el sillón dentro de la sala. Y lo ultimo que escuche fue "Finn hará venganza"... Pero.. ¿VENGANZA? ¿PORQUE?, luego solo cerré mis ojos y mi brazo me dolía como si me hubieran inyectado.

Desperté y no recordaba nada más que solo una palabra o no se si era un nombre.. No se que sucedio.. Me sentía cansada y solo vi a el Dr. con esa canosa barba, sonriéndome y yo decidí hacer lo mismo. Me levanté del sillón.. El cual no se que hacia alli y me retire.















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