Capítulo 4: Resplandores y un recuerdo

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Mihawk pasó ligeramente sus dedos por el suave pelaje a lo largo de la espalda de Draco.  El tigre estaba sorprendentemente pacífico a pesar de estar en un bote y las pocas veces que necesitó usar el baño, simplemente se sumergió en el agua y simplemente lo hizo en el océano.  Era ... muy extraño, pero no se quejaría de ello.

Sus pensamientos se alejaron de él y comenzó a pensar en el pasado.  Luna y su dulce sonrisa, Neville siempre cubierto de tierra y un nuevo descubrimiento de algún tipo de planta… y luego Draco.  La rubia sonriente que siempre tuvo al menos dos planes de respaldo para acompañar al primero.  Parecía que no importaban los meses o los años, siempre serían una constante en su mente.  Su descarriada familia ... los extrañaba muchísimo.

'buru, buru, buru,' Un largo suspiro lo dejó y retiró sus dedos de acariciar a Draco para sacar el pequeño caracol de su bolsillo.  'Ca-lik'.  El tigre refunfuñó y fulminó con la mirada antes de darse la vuelta.

¡Hawky!  Ya te extraño.'  La voz de la Muerte salió más oscura y profunda que antes.  La cara del caracol se torció en una sonrisa burlona llena de dientes afilados y ojos rojos.

"Hablamos hace una semana, Muerte."  Mihawk habló con calma mientras sostenía el pequeño caracol.

Un resoplido dejó al caracol y la sonrisa se apagó, "Sí, pero eso fue hace una semana".  La muerte se estresó y la expresión cambió a algo parecido a un puchero.  De todos modos, como tu tutor, tengo derecho a comprobar cómo estás y preguntarte cómo estás.

Mihawk suspiró y pasó una mano por su cabello, "Estoy bien, Muerte. Incluso tengo un nuevo amigo. Un tigre plateado al que llamé Draco ya que ambos tienen la misma personalidad".  Una sonrisa se dibujó en sus labios cuando sus ojos se posaron en el tigre dormido.

'Oh ... ¿no hay amigos humanos?  ¿Específicamente del género masculino?  Death preguntó sin rodeos y un tic irritado se formó sobre el ojo del hombre.

"Un conocido", logró salir.

'¿Su nombre?'  La muerte siguió adelante con una sonrisa vertiginosa.

Otro largo suspiro dejó a Mihawk y puso los ojos en blanco, "Shanks. Solo dije que podría ser mi amigo si lograba igualarme en una pelea de espadas".  Señaló a su guardián bastante poco ortodoxo.

Un 'tsk' dejó a la deidad y luego un ceño fruncido tiró de la boca del caracol.  —No es justo, Mihawk.  Yo mismo te entrené.  Hablaba con calma ahora y parecía decepcionado.

"Ya veremos", dijo Mihawk y miró hacia atrás con un suspiro.  "Tengo que irme, Muerte. Un barco me sigue."

Esté a salvo, pequeño Halcón.  Death dijo y mientras colgaba, Mihawk sintió un escalofrío de presagio trepar por su columna.  No había sido una buena idea compartir el nombre del pelirrojo… solo podía sentirlo en su alma.

Tocó suavemente a Draco en la pierna y observó al tigre moverse.  Una expresión perezosa se apoderó de él cuando el barco más grande se acercó a su pequeño bote y un hombre saltó a la cubierta.  Sus ojos eran codiciosos y llenos de lujuria mientras miraba a Mihawk.  El hombre de ojos de halcón, sin embargo, apenas le dedicó una mirada.

"¿A dónde vas, chico?"  Preguntó el hombre y finalmente llamó la atención de Mihawk.

"En ninguna parte cerca de ti," habló claramente y Draco se sentó junto a su maestro, preparado para ser la primera línea de defensa.

El capitán del barco tropezó al ver un tigre adulto.  Sin embargo, no pareció captar el mensaje y trató de enderezarse de nuevo y mirar por encima del hombre.  "Escucha, muchacho. Cuando te hago una pregunta, espero una respuesta".

La libertad de un halcón{cancelada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora