Dame Una Oportunidad Más

Parte 2

Otra vez esta sensación de flotar en este vacío, y de nuevo, esa voz, pero esta ves siento que esta a centímetros de mi, en eso la alarma me despierta -ahg, quisiera saber que mierda significa ese sueño- tomo mi teléfono de la mesita y veo que es hora de prepararme para la Universidad, así que decido levantarme y alistar mis cosas para la escuela, entro a la ducha, me quito mi ropa  para quedar totalmente desnudo, al cabo de un rato de enjabonarme y dejar caer el agua por mi cuerpo y mi pelaje, decido que ya era tiempo de detener mi baño, salgo de la ducha y tomo mi toalla, con la cual seco mi pelo y mis orejas, en eso me miro al espejo y por un momento juraría que vi una silueta diferente a la mía, pero cuando parpadeé, pero al volver a ver el reflejo del espejo, me doy cuenta de que solo era yo reflejado en el, eso me puso los pelos de punta, tal vez fue el vapor de la ducha o por que me estoy quedando ciego. En fin, lo que vi ya no esta, así que no me debería de importar ahora, lo que tengo que hacer es prepararme y alistarme para ir a la instituto, al bajar ya listo con mi ropa y mis cosas de la U, me acerco a la cocina y me preparo algo de desayunar, prendo la estufa y tomo una crema y algunas verduras del refrigerador, luego pongo las papas y las zanahorias a freír por un rato, cuando ya están doradas las saco y les pongo algo de la crema que saque anteriormente, al terminar de preparar mi desayuno me senté y serví un plato extra para mi mama, que suele levantarse a esta horas para acompañarme a desayunar -buenos días hijo- hablando del rey de roma -buenos días mamá, ¿cómo dormiste?- dije, a lo que ella respondió -bien, solo que tuve un poco de frio y creo que me resfrié- -ay mamá, solo exageras, estarás bien, y si no, pues me tendrás a mi para cuidarte- -oww, Samuelito- después de eso me da unos cuantos besos en la mejilla -aaay, mamá, ya estoy grande para que me hagas eso- dije un tanto apenado siguiendo con mi comida -aun que tengas 40 o mas, tu no te salvaras de los besos de tu madre- -jeje, lo se- con eso dicho se creo un silencio, pero no uno incomodo, si no uno de tranquilidad, uno en el que cada quien piensa en sus cosas sin molestar a nadie, pasan los minutos y termino mi desayuno, e que por cierto me salió fabuloso, me levanto de la mesa, lavo mi plato, me despido de mi madre tomo mi mochila y mis cosas, y salgo por la puerta, y me dirijo hacia la estación de autobuses, en eso veo a alguien muy familiar en la parada del bus, alguien, ¿de pelaje blanco?

Al acercarme me doy cuenta que es Cristofer -¡ey! Cristofer, buenos días amigo- dije -oh, hola Samuel, eh, si yo y mi familia nos acabos de mudar a unas cuantas casas de aquí, es algo pequeña, pero esta... bien supongo- dijo con algo de pesar en esas ultimas palabras -oh, que, eeh ¿bien? supongo, mínimo no están en la calle jeje- al decir eso me percato de que sonaba mas gracioso en mi cabeza, y ahora que lo dije me siento como un idiota -je, si algo así jajaja- en eso el se comenzó a reír, y para no dejarlo colgado también me reí, el resto de personas en la parada nos vieron raro, así que el y yo paramos de reírnos, en eso el autobús llega y nos subimos, ya en el autobús me siento al frente donde suelo sentarme, ya que me gusta mucho la brisa momentánea de cuando las puertas del autobús se abren, al mirar a mi costado no vi a Cristofer, así que giro mi cabeza para ver a donde fue y lo que veo es que Cristofer paso de largo y se sentó hasta el final del autobús, al mirar a Cristofer veo que solo se queda mirando por la ventana, ¿se le olvido de que se subió conmigo? que grosero, en eso tomo mi mochila y decido levantarme de mi asiento para dirigirme al lado de el, me siento a un lado de Cristofer, en eso el me voltea a ver -oh, pensé que te quedarías en los asientos del frente- dijo con seriedad -si, me gusta estar sentado en el frente, pero quería hablar contigo Cristofer- dije con una sonrisa en mi rostro mientras movía un poco mi cola, a lo que el lo nota y solo se gira otra vez a la ventana, en eso pensé "se habrá enojado conmigo, buen trabajo Sam" pero mi pensamiento fue interrumpido por su voz -y... de que quieres hablar- dijo eso sin despejar su mirada seria del espejo, a lo que yo respondo -pues por donde empiezo- en eso escuchó un ligero susurro -ay no- solo sonreí ante esa respuesta de el, y decido no abrumarlo tanto, solo por hoy.