The Magic Museum | VMin

Único

POV: JiMin

Recuerdo que esta mañana al despertarme solamente quería darme la vuelta en la cama y seguir durmiendo, a pesar de que ya era oficialmente mi primer día de trabajo y tenía que cumplir con mis cometidos.

Con pesadez me había levantado, para ducharme y prepararme para otro día más, otro día aburrido y monótono en mi vida; pero lo que menos esperaba es que al llegar al trabajo me encontrara en estas condiciones.

Unas condiciones un tanto sorpresivas, que me harían correr el mayor riesgo y aventura de toda mi vida.

—3 horas antes—

Sonó el despertador alrededor de las 6.30 am, y como era mi primer día de trabajo después de tanto tiempo, me levanté con pesadez y sin ganas de dejar mi cama. Y aunque quisiera girarme y dar vueltas hasta volverme a quedar dormido, tenía que cumplir; así que con todas las pocas ganas del mundo, cogí mi móvil apagando la alarma y me levanté finalmente.

A paso de tortuga voy al baño, la única señal que daba en vida eran mis repetidos bostezos y la forma tan perezosa que tenía para despertarme en el trayecto.

Como siempre hice mi rutina de mañana, ducha rápida y a buscar ropa para prepararme para el nuevo día. Decido optar por ropa negra completamente, camisa holgada, igual que mis vaqueros indie rotos, y por último unas zapatillas blancas. Como toque final cepillo mi pelo mojado hacia atrás complementándolo, y en mi cuello un par de collares de oro. Perfecto para el día.

Miré el reloj después de un tiempo y me percaté de que solamente eran las 7.15 am, por lo que aún tenía tiempo de sobra para pasarme por el Starbucks que estaba cerca del parque y comprarme un café para ir al trabajo, así que sobrado, cogí mi bolso con todo lo necesario para el día, un abrigo, junto mi cartera y mis llaves; y salí finalmente de casa.

De mi casa al parque era un trayecto de 5 minutos en total, por lo que sin darme cuenta ya estaba pagando por mi frapuccino para seguir nuevamente mi recorrido.

...

Al llegar al museo —tan prestigioso museo de arte cultural de la ciudad— no pude evitar soltar una sonrisa, ya que como estudiante de artes plásticas, mi sueño se había convertido en trabajar en un museo que tratara sobre el arte. Y qué mejor que este museo tan admirado.

Pasando la entrada, veo que mi mejor amigo, TaeHyung, ya había encendido todas las luces del lugar y estaba dando los últimos preparativos para tener todo listo para la hora de apertura, siendo que esta es a las 9 am.

Paso al lado de él y me saluda con una linda sonrisa, y yo imito su acción para ir al almacén y ponerme la chaqueta del uniforme.

Cuando vuelvo Tae me miraba preocupado, y eso me asustó un poco.

—Hey, ¿qué pasa?— le pregunté.

—Verás... Hay un pequeño y gran problema...—comenta un poco angustiado. Por lo que yo le asiento para que me siga contando de qué problema se trata— ¿Recuerdas que iba a ver un "gran" cambio climático?—enfatizó la comas, y yo solo pude asentir nuevamente, esta vez dudando del tema— Pues resulta que ese cambio era una inundación...

Y me congelé, no podía ser. Lo miré y abrí mis ojos como platos, y como pude reaccioné y salí corriendo a la sala principal. Iba corriendo muy alterado y Tae me pisaba los talones, cuando ya iba llegando me pude dar cuenta de los pequeños charcos de agua que iban apareciendo por el pasillo.

TaeHyung me alcanzó y me frenó, nuestras miradas se conectaron, avisando de que fuera más lento. Al alzar la vista, todo era un absoluto desastre, los cuadros estaban desparramados por la laguna que se había formada en la gran sala, estaban todos con sus pinturas disueltas volviendo el agua un arcoiris y manchando las paredes en el acto.