Mirando la televisión recordó la frase "Los pueblos pequeños ocultan los peores secretos", no sabía de dónde provenía o de quien la escuchó, pero a pesar de ello, estaba de acuerdo con dicha. Su pueblo llamado South Park era escalofriante y los habitantes también, pero había uno en particular que sobresalía del resto, era un jodido asesino en serie. Asesinando a niños y adolescentes los cuales todos tenían una característica en común, sus ojos.
Kenny McCormick estaba realmente molesto ante la indiferencia de los adultos y la policía en dicho tema. A nadie le importaba hasta que alguien moría y todos lamentaban la muerte, la policía nunca trató de capturar al asesino y los niños y adolescentes tenían que vivir con miedo durante años hasta que alcanzaban la edad adulta y estaban fuera de peligro.
El chico salió de sus pensamientos y alzo la ceja por un momento al notar que la caricatura infantil que veía con su hermana menor se vio interrumpida para dar la noticia acerca de un adolescente encontrado muerto en el lago, miró hacia su hermana para encontrarla dormida profundamente, él no quería que su hermana se traumatice por las escenas mostradas, así que se aseguro que ella estaba completamente dormida para seguir viendo la televisión. Regresando su mirada hacia la pantalla escuchó atentamente al reportero hablar acerca de un chico identificado como Eric Cartman.
Kenny casi quiso reír al escuchar el nombre. ¿Eric Cartman? Por supuesto que lo conocía, era el gordo que constantemente lo molestaba en la escuela por ser pobre. Y ahora estaba muerto. A pesar de sentirse aliviado, un sentimiento de incomodidad lo invadió, hace unos días había visto a su compañero de clase mandando a joder a una compañera de clase. Definitivamente no lo extrañaría, pero, aun así, era raro que de veinte estudiantes ahora quedarán quince, hubo algunos que extrañaban como Kyle Broflovski o Stanley Marsh...
Con sólo pensar en sus difuntos compañeros de clase, el miedo y la pesadez reemplazaron la incomodidad que sentía. ¿Qué pasaba si el siguiente en morir era alguien cercano y querido como su hermana menor o su hermano mayor? Inclusive temía la idea de que él mismo fuera el siguiente en ser asesinado. Aunque Kenny sabía que era imposible, sus hermanos tenían ojos color marrón oscuro y el mismo Kenny ojos color celestes, nada comparado a los exóticos ojos heterocromáticos de Eric o los brillantes y hermosos ojos verde esmeralda de Kyle.
El adolescente soltó un suspiro cuando la televisión se apagó de repente y dirigió su atención al señor que estaba enfrente de él. Su padre. El cual estaba claramente enojado y Kenny sólo podía mirarlo con expresión aburrida, su padre gritó algo acerca de cervezas y que debía ir a por ellas a la licorería. Al chico le preocupó más que su hermana se despertase por los rugidos del hombre mayor así que se dispuso a irse a cumplir con la orden de su padre, le dirigió una rápida mirada a su hermana dormida y salió de la casa.
—Ugh —Kenny soltó un sonido exasperado al sentir la lluvia mojarle el cabello y los hombros. Debía apurarse si quería que su parka se secara para llevárselo mañana a la escuela. Estaban en tiempo de lluvias y se sentía un estúpido por olvidarlo.
Pero qué importa. Pensó mientras soltaba otro suspiro.
Se apresuro por las calles yendo casi corriendo, pero teniendo especial cuidado en no resbalar en la mojada acera.
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