Me sonaba raro escuchar ese término, fue en una canción de Kelvis que lo encontré, luego me di cuenta de a que se refería, de como definir e identificar a esa alma sincera y pura de influencias sanadoras.
Es la personificación de la paz esté donde sea que se encuentre, puede estar al lado tuyo o puede estar en otra dimensión del espacio (país o provincia). No tiene que hacer mucho para darte la sensación de que todo va a estar bien. No hay palabras para resumir lo que sientes cuando la piensas, pero el cerebro sabe como activar el modo "ten paz hijo mío, la vida va sobre ruedas" cuando andas(ando) perdido y en ella me encuentro.
¡Alto! Esa es otra frase que me parecía mal dicha. Eso de encontrarse en otra persona no podía ser real, y más cuando ya han pasado los primeros 5 días donde "hay esperanzas, pero luego se van", según Morat, y luego no llega un "vuelvo a encontrarte".
Digamos que el corazón está quebrado y no has podido "cambiarlo", grietas van grietas vienen, ¿cómo puedes no sentir dolor así? Necesitas paz, sentirse uno iluminado por el amor en medio de una espesa oscuridad.
Entonces funciona así, lo he vivido, te llega su sonrisa, su tono de voz ...su presencia (aún ausente). Es inevitablemente hermoso sentir como empieza el proceso inmunológico (es una forma de llamarlo, aunque de sentimientos se trate creo que aplica) a trabajar en tu alma más o menos destruida. Las grietas del corazón están, pero ya no duelen. Mis pulmones empiezan a respirar el más puro aire. Sonrió de mi lado favorito (el izquierdo), mientras una voz interior articula sin labios la frase más hermosa que puede sentir un ser dañado: "Tranquilo, ya lo malo ha pasado todo está bien". Y de hecho es verdad, lo está. Pude entenderlo entonces, cuando la encontré, por eso lo digo hasta cantando en voz baja, estoy seguro, ella es mi curandera.
