One-shots ~Damirae~

Niñeros.

Mala idea.

Fue mala idea apostar y perder para luego ser niñero de una niña gritona y llorona.

Mar'i Grayson no paraba de insistirle y molestar a su tío Damian sobre cualquier cosa, y peor, apenas comenzaba este desesperante día.

"¡Tío, tío Dami, cómprame una nueva mascota, por favor cómpramela!" Repitió nuevamente Mar'i entre lágrimas mientras tiraba de la manga de la camisa del tío Damian una y otra vez.

Damian ya estaba que se mataba. La desesperación se combinaba con su enfadado en una sustancia homogénea. Su cordura y paciencia no tardarían en ceder a su peligrosa intolerancia.

"Tienes peces, diviértete con ellos" Damian ni siquiera prestó atención en sus palabras, solo prosiguió firmando importantes papeles de empresas Wayne y se cuestionó su capacidad de mantener a un infante con vida.

Pero la niña no desistió a sus órdenes. "Es que quiero otros porque esos ya no se mueven" Mar'i señaló con su dedo la pecera donde yacían sus dos peces anaranjados flotando boca arriba sobre la tenue superficie del agua; estaban muertos.

Damian frunció en ceño, Anders y el estúpido de Grayson cometieron un error al dejarle una responsabilidad como cuidar peces a una niña de tan solo cuatro años. Aunque increíblemente ella podría tener la suficiencia para hacerlo perder la cabeza.

"Otra razón para no hacerlo"

Los gritos y chillidos de la niña aumentaron más, causando un escándalo y estrépito en la gran mansión. Damian se agarró el puente de la nariz masajeandolo; los niños eran insoportables.

"¡Llamaré a la tía Rachel, ella seguro que me los comprará!" Exclamó la niña y comenzó a esculcar en su bolso de gato.

"No es tu tía... y no tienes ni siquiera como contactarla"

"Sí que puedo"

Mar'i sacó de su bolso un aparato circular color rosado brillante, y se lo presumió a Damian agitandolo frente a su rostro. Él arrugó aún más las cejas en cuanto lo vio. Conocía ese pegajoso aparato, Mar'i y Rachel lo usaban en caso de emergencias o cuando se necesitaran, esto iba más dirigido a Mar'i, pero como sea, ambas siempre respondían al llamado.

A Damian siempre le inconformó la cercana relación entre Mar'i y Rachel, actuaban como hermanas y Rachel, en especial, tenía una debilidad con aquella chiquilla manipuladora.

"Ni se te ocurra, niña malcriada"

Damian se levantó de su asiento, exaltado. No quería que Rachel se involucrara en la pelea que compartía con su sobrina.

"Te acusaré con Rachel y ella te regañará"

¿Qué?

"Tonterías. Tu tía Rachel no puede hacer eso"

"¡Sí lo hace! ¡Siempre lo hace! ¡Le llamaré ahora mismo!"

Damian se apresuró a llegar donde la niña se encontraba y quitarle su pequeño instrumento, pero fue demasiado tarde, pues Mar'i ya había presionado el botón de llamada. Señal que llegaría a Rachel en cualquier momento.

"¡Mar'i Grayson!" Damian gruñó sin paciencia. No supo de donde sacó la imprudencia para empezar a corretearla por toda la mansión, parecía que Mar'i no le tenía ningún temor mientras volaba por los aires entre risas y burlas, creyendo que ambos jugaban a las atrapadas. Tal vez su tío no era tan amargado como creía.

Ninguno se dio cuenta cuando un portal apareció frente a ellos, de cuyo interior salió una chica alarmada.

"¡Mar'i, ¿qué pasa? ¿qué sucede? ¿qué...?!"