Cielo y estrellas

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El problema con las estrellas era que no eran visible por siempre. Claro, ahí estaban pero de que servía que estuvieran si no se podían ver. Algunas personas eran como las estrellas, a veces estaban y cuando lo hacían brillaban, te iluminaban pero otras veces no estaban. Y podían tardar mucho tiempo en volver.

 A lo largo de su vida, Nico se había encontrado con varias estrellas. Iluminaban su camino y le hacían creer que ya nunca estaría sólo, si embargo en cuanto amanecía se desvanecían, rompían sus ilusiones y estaba solo de nuevo.

Había llegado a la conclusión que todas las personas eran estrellas, porque todos eran convenencieros, estaban ahí por un rato hasta obtener lo que necesitaban, a nadie le importa que le sucede a las personas que no tienen peso en su vida. Y Nico no tenia peso en la vida de nadie.

Si, las personas eran estrellas. Nico odiaba las estrellas.

Cuando conoció a Will Solace supo que ese chico no sería la excepción, era humano, por lo tanto era una estrella. Seria su amigo por un rato y después lo abandonaría, así pasaba siempre.

Entonces Nico esperó, esperó a que Will lo usara en su conveniencia o tomara lo que necesitaba de él.

Esperó, esperó, esperó y de paso se enamoró.

Una tontería de su parte tal vez, enamorarse de una estrella. En serio trató de no hacerlo pero uno no elige de quien se enamora, porque Nico jamás se enamoraría de alguien como Will, alguien tan brillante. Ese tipo de estrellas dolían más cuando se iban.

—¿Qué haces ahí?— hablando del rey de Roma, Will se sentó junto a él en el muelle.

—Pensando— contestó Nico después de haberse sobresaltado un poco al oír su voz.

—¿En qué piensas?

"En ti"

—Que te importa.

—Uuuy alguien está de mal humor— Bromeó Will con su típica sonrisa, estaba muy cerca, hombro con hombro, a Nico le daban escalofríos.

—Déjame en paz, Solace.

Will hizo un puchero acercándose aún más a Nico.

—Háblame bonito o lloro.

Nico sintió su cara enrojecer, si ese chico se acercaba un centímetro más le iba a dar un infarto.

—Vete a volar.

—Mándame a volar.

—Lo acabo de hacer.

Will puso una cara de tristeza fingida y se levantó de su lugar, caminando lentamente fuera del muelle.

"Míralo pobrecillo" pensó una parte de él "Es una estrella" se recordó a sí mismo "Mejor que se vaya de una vez". De cualquier forma sintió remordimiento aunque sabía que Will estaba actuando así para que lo llamará de vuelta, cayó en su trampa.

—Ya, ya, no hagas un teatro. —dijo Nico levantándose del muelle también.

Will lo espero y comenzaron a caminar un poco hacia el bosque.

—¿Y en que meditabas al atardecer?

—Nunca dije que estaba meditando.

—Bueno, se veía muy poético.

—Sólo estaba sentado.

—Sentado poéticamente.

Nico suspiró rendido.

—¿Por qué eres mi amigo?—preguntó.

—¿A que te refieres?

—Lo que dije ¿Por qué?

Will parecía no entender del todo su pregunta.

—Pues por que me caes bien ¿que quieres decir?—contestó.

Nico pensó que tal vez no estaba formulando bien la pregunta pero ya le daba pereza seguir con el tema.

—No importa.

—Si importa— reprochó Will.

—No importa.

—A ti te importa.

—Eres muy terco ¿te lo han dicho?

—Miles de veces si te soy sincero— ambos se quedaron en un leve silencio— ¿Entonces...?

—¿Qué quieres de mi Solace?

Will sonrió.

—Hay muchas formas de que conteste eso, especifica. Si te refieres a por qué conservo tu amistad es porque eres genial.

Nico asintió.

—Si, si, hago viajes sombra genial ¿no?— había escuchado eso muchas veces "¡Wow Nico puede llamar esqueletos! ¡genial!" "¡Wow los poderes de Nico!" "¡Genial!"

—¡No!— contestó él —Es decir, si es genial lo que haces pero no me refiero a eso. Tu eres genial, tu persona, tu.

Will le sonrió y Nico supo que ya no había marcha atrás. Estaba perdido por esa estrella.

—Y además eres muy lindo—continuó él como si nada.

Sintió su cara enrojecer y el pulso acelerado, en serio le iba a dar un infarto o algo. Aunque sería su propia culpa por enamorar de una estrella.

Pero tal vez... tal vez, Will Solace podía no ser una estrella.

Tal vez, Will Solace podía ser su cielo, el que siempre estaba ahí, fuera día o fuera noche, aunque lloviera o secara. Estaba ahí.

Alejó esos pensamientos de su cabeza, no quería hacerse ilusiones.

—Oye Nico ¿te puedo contar algo?

El asintió sin darle mucha importancia al asunto pero casi se le sale el corazón cuando escuchó un:

—Me gustas mucho. No tienes que decir nada solo quería que lo supieras. Eres genial.

Nico lo miró buscando un rastro de que fuera alguna broma en su rostro, pero no, Will tenía una ligera sonrisa y un rubor que cubría sus mejillas.

Él sonrió de vuelta, mil pensamientos en su cabeza. Había visto a sus amigos conseguir un cielo, no necesariamente romántico pero alguien que siempre estaba ahí, alguien que nunca se iría. Él no creía, no imaginaba que pudiera tener su propio cielo.

Mientras pensaba se dio cuenta que no le había respondido nada aun.

—Will. —fue todo lo que sus labios dijeron, de repente mil nervios lo acorralaron ¿que se sentiría tener un cielo? ¿y si en realidad no era más que una estrella muy brillante? ¿que tal si le rompían la ilusión?

Alejó esos pensamientos y respiro profundo. Si era una estrella no tenia nada que perder. Y si resultaba ser su cielo...

Le dedicó la sonrisa más sincera en él para después desviar la mirada sintiendo calor.

—También me gustas.

A Will se le escapó una risita y se cubrió su cara con sus manos.

—Creo que me voy a enamorar de ti di Angelo.

—Pues... creo que yo también.

Se miraron a los ojos y no ocuparon más.

Eran el cielo del otro. 

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Hi :3

Mañana voy a publicar la historia solangelo que les conté asi que ¡yay! por si se quieren dar una vuelta publicaré los primeros dos capitulos.

Otra cosa es que dudo poder actualizar el ultimo one shot el jueves y el fin de semana lo tengo reservado para BTS xd asi que nos vemos el proximo lunes :D 

(¿Que? ¿Yo haciendo excusas para alargar la publicación de esto porque no quiero que se acabe? jaja nooo ¿de donde sacan eso?)

~Lovegood ♤

One shots de Solangelo! (25) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora