•- The girl who only looking peace and happines in her short life ☮✌

Capítulo 1: Día de pesadillas complicadas.

Capítulo 1: Día de pesadillas complicadas.

El comienzo de unos días de recuerdos. . .

Aquí empieza la historia de aquella señorita  de tan sólo 15 años que era normal pero que “de un día para otro cambió” para los ojos de los demás pero no para ella. Toda su vida complicada empezó cuando conoció a Sofía la cual le trajo tristes recuerdos pasados que ella no recordaba la cual le trajeron situaciones que le hacían consumir el humo de un cigarrillo. Así que empieza toda esta historia con recuerdos que le explicarán cosas de aquella princesita que logró luchar contra sus demonios  todas las noches para poder sonreír el día a día .

Ella estaba allí tumbada en su cama en la madrugada dándose vueltas de un lado a otro tratando de dormir ya que había sido levantada por un sueño bonito que s fue destruyendo ya que aparecieron sus demonios los cuales la levantaron de golpe. Trataba de dormir pero como no lo lograba, se dedicó a tratar de pensar que ficha fue mal jugada en aquella pesadilla  para que su amigo ‘Estevan’ no pueda aparecer de nuevo en sus sueños.

Recordando aquel sueño que se convirtió en pesadilla  . .

▬Yoonie:  ¡Tarado, ven aquí! —Dijo entre gritos escandalosos levantando una de sus manos llamándolo con una señal— ¡Tengo gomitas de ositos para nosotros, ven!

▬ Estevan: ¡Ya voy! —Corrió apresuradamente hacia ella llevando dos conos de helados sonriéndole dulcemente—

▬Yoonie:  Tardaste mucho, ya me comí algunos—Murmuró entre risas después de haberle mostrado su lengua en forma burlona—

▬ Estevan: Grr Comelona. —Gruñó pronunciando aquellas palabras entre dientes—A la próxima que no me esperes, te las quitaré y me las comeré todas sin darte una. ¿Entendido?

▬Yoonie:  Ay sí.Ay sí. Que gruñón.—Musitó mientras en su rostro se dibujaba un puchero—A la próxima que me amenaces, te morderé como a ese osito. —Dijo mordiendo la cabeza de aquella gomita comestible—

▬ Estevan: No jodas.No lo harás porque si no tendrás problemas con este chico a que le debes muchos favores—Pronunció aquellas palabras con fastidio—

▬Yoonie:  Que arrogante eres, por eso. . —Cogió aquella bolsita llena de gomitas tras decirle aquellas palabras huyendo apresuradamente de aquel lugar con risas escandalosa mirando hacia atrás—

▬ Estevan: ¡Espera! —Corrió a toda velocidad hacia ella ya que la vio entrar a aquel bosque lleno de árboles que apenas dejaban caer débiles rayos de sol la cual estaba prohibida por aquella bruja que les advirtió que uno de ellos por ser una pareja saldrá herido si entraban a ese lugar porque ya estaba escrito en una piedra de aquel lugar pero aquella persona podría ser salvada cuando encontrasen esa piedra pero aquella princesita no le permitió seguir escuchando a aquella bruja porque le susurró al oído que estaba loca .Por eso ,ellos seguían su recorrido cerca de ese lugar hasta que ocurrió eso—¡No entres allí, tonta! —Gritó a todo pulmón recordando lo que le dijo aquella bruja—Porque.. —Se quedó paralizado derramando unas lágrimas por sus mejillas al ver a una gran bestia saliendo del cuerpo de una jovencita casi parecida a aquella princesita, sólo que aquella chica era más baja y aparentaba de 9 o 10 años a unos cuantos metros de su amiga—

▬Yoonie:  ¡¿Por qué?! Te da miedo, nenita —Hizo un aegyo de un niño llorón de forma burlona hasta que vio a su amigo palidecerse derramando lágrimas en un estado de shock— Este-Esteva-Estevan. —Corrió aterrorizada hacia el contrario al sentir la respiración de alguien en su hombro— ¿Quién..? —Antes de terminar de preguntar se giró al sentir la palma de su amigo golpearla fuertemente en su hombro para que voltease. Luego de ese tocamiento de parte de su amigo, giró rápidamente encontrándose con esa bestia lo cual le hizo sacar aquella espada que siempre llevaba escondida en su pierna bajo sus jeans— Quédate aquí. No te acerques, ¿Okis,Estevan? —Apresuró a decirle acercándose a ese demonio dándole una batalla con aquella espada filosa y dañándole con sus recuerdos que ya había logrado encontrar. Luego de ese momento, Estevan huyó en el bosque mientras era perseguido por otro demonio que esta vez era una mujer. Siguió a aquella demonia con su espada en las manos tras haberse recogido su cabello en una coleta,al llegar a ellos gritó fuertemente ¡Estevan, no! Al ver que se introdujo en aquel portal donde siempre los demonios huían heridos después de luchar contra ella. Gritó: ¡Estevan, no.No te vayas!