XXII

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3ra Persona'

El de orbes carmesí cargaba a la de hebras rubias a su habitacion, habían estado en una fiesta y ella había bailado pasada de copas, claro, el albino la vigilaba obviamente, su hermano lo mataría si le pasaba algo.

La de apellido Fairy de quedo dormida en los brazos del albino, y el aun sobrio, la cargo y empezo a caminar hacia el hotel, ya que tenían habitaciones vecinas.

Los empleados empezaron a soltar leves risas, les parecía muy adorable que el albino cargara asi a su "amiga".

Se le dificulto un poco, pero al final abrió la puerta del cuarto de la rubia sin tener que dejarla en el piso, King lo mataría si algo le pasara a su hermana menor si el albino le quita la vista por solo 5 segundos.

Si, Ban había recibido estrictas indicaciones de Elizabeth de que no le quitara la vista de encima a su amiga, 2 segundos y ya estaría en llamas la mitad de la Isla :v 

Dejo las cosas de la de hebras doradas en un sillón, recostó a la fémina en la cama, le saco los zapatos y la cubrió con las sabanas, antes de irse le dejo una nota en la cómoda al lado de su cama.

Iba a apagar la luz de la lampara en la misma cómoda e irse, pero la luz suave de la lampara se fue de repente, intento prenderla de nuevo pero esta simplemente no funcionaba.

No le dio importancia, y quiso irse...pero la, para el al menos, pequeña mano de su amiga lo agarro de la chaqueta, impidiendo que se vaya.

Ban--Elaine, no.--Intento no sonar muy cortante, para que la rubia no se sienta mal.

Ele--Solo un rato..--Dijo, se notaba un poco de miedo en su voz, pero este estaba disimulado.

Ban--Tu hermano me mataría si  me quedo, asi que lo siento, pero prefiero vivir..

Ele--Por favor no..--La rubia tenia los ojos levemente abiertos, pero se notaba un leve humedecimiento en ellos poco a poco, hasta que de uno de sus ojos miel salio una lagrima.

El chico se sorprendió, nunca la había visto llorar.

Ele--Le tengo miedo a la oscuridad..--Se le notaba apenada, era un miedo "ridículo" para ella.

Su amigo se sentó en la cama, al mismo tiempo que su contraria.

Las lagrimas poco a poco se liberaban de los ojos se la rubia de baja estatura.

El chico, comprensivo como es una pequeña parte de el, abrazo a la chica que lo acompañaba, iluminados por la tenue luz de la luna llena que entraba por la puerta de cristal del balcón.

Ele--Mi mama murió en una luna llena como esta, se había ido la luz y......y....

Los sollozos de la rubia interrumpieron su hablar, se sentia dolida por recordar aquella horrible perdida que, desgraciadamente, ella había presenciado.

Lo que paso, fue que La pequeña Elaine de tan solo 4 años estaba con su madre en el salón de la casa, haciendo pulseras con caña y algunas cuencas de plástico, cuando de un momento para el otro, se fue la luz y ambas no le tomaron importancia, si no hasta que escucharon como alguien rompía una de las ventanas, y caminaba a paso apresurado por toda la casa, en busca de algo, hasta que lo encontró al entrar al salón...

Era un hombre alto, de cabellos negros y ojos rojos, llevaba un cuchillo y una linterna, se acerco a las féminas y alzo su cuchillo, en dirección a la mas grande con intenciones de matarla, y antes de hacerlo su madre le dijo a la pequeña que corriera, lo mas lejos posible.

Y eso hizo, corrió hacia una ventana abierta, y miro hacia atras..

Grave error...

Pudo ver como el asesino apuñalaba una y otra vez a su madre, mientras esta luchaba para alejarlo, pero era muy tarde para ella..

El Arte de Matar [Melizabeth]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora