¡Segunda temporada de Los gemelos Lee!
-puedo sentir los latidos de tu corazón, y se que son por mi causa que laten tan rápido-
¿de una amistad apegada pueden surgir sentimientos mutuos?
¡¡¡Narracion solo desde el punto de vista de Young!!!
Un día estaba con mi gemelo en nuestro hogar, ya que era un ritual ver películas hasta tarde el domingo y amanecer como zombies el día lunes para ir a la Universidad. Todos estamos en último año y estoy realmente feliz de haber logrado llegar viva a esto. Lo digo porque la Universidad apesta y realmente me estresa que mis compañeros sean unos buenos para nada y me pidan las respuestas de todo. En fin, la estúpida alarma sonó haciendome despertar de mi dulce ensoñación sobre gatos y Seungmin.
Me vestí con un chaleco de lana suave color blanco con franjas negras que me había regalado Jeongin por haberme molestado tanto tiempo, una falda negra a los muslos y unas Vans negras que combinaban. Até mi cabello y coloque algo de perfume en mi cuello y muñecas.
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[Imagen referencial]
Desperté como pude a Minho y este a quejas se levantó chocando con el fierro de la litera. Este comenzo a pelear con el dicho metal mientras yo reía, se veía demasiado graciaoso y es que el siempre se golpea o cosas así. Baje a preparar el desayuno que era simplemente un tazón de frutas con crema, lo deje en la mesa y ví por el umbral de la puerta a mi gemelo mirando mi ropa y haciendo una seña de aprobación. Se sentó frente a mi apenas se lo indiqué.
—me gusta tu ropa de hoy, ¿eso te lo dió Innie no?— pregunto llevando su cuchara llena de frutas a su boca.
—que observador, si, esta me la dio Jeong. Igual y quizás en la tarde me lo cambie por algo más cómodo— asentí levemente.
Hablamos de varios temas en ese desayuno que tuvimos ya que debíamos irnos pronto a la uni y no nos veremos hasta el almuerzo.
Tomamos nuestras cosas al terminar y salimos de la casa asegurandonos de dejarla cerrada con seguro. Nos pusimos a caminar tomados de las manos ya que yo soy muy revoltosa al caminar y Minho es muy despistado, así que si nos atropella un camión nos matará juntos. Al menos si salimos y llegamos sin rasguños a la entrada de la Universidad, despidiendonos con un beso en la mejilla y unos "que te vaya bien estúpida" Y "a ti también ridículo" Me fui acercando a mi Grupo de amigos.
Taeyong estudia baile junto a Jaehyun ya que luego de dos años y medio que pasó peleado con el, al final cedió a perdonarlo y son amigos. Hansol estudia Biología marina, Beomgyu y Yeon estudian diseño gráfico; Aisha y Ryujin estudian medicina, Chenle estudia gastronomía junto a Jin. Minghao estudia para ser profesor de matemáticas y Jun para literatura. Jaemin estudia repostería porque quiere encargarse de la cafetería de su madre junto a Jeno, quien estudia marketing. Seung y yo estudiamos Artes junto a Felix y Hyunjin. sus parejas (Chaewon y BangChan) estudian contabilidad y administración de empresas. Minho y Han estudian lo mismo: veterinaria. Chang estudia canto y rap junto a Jeongin y así es como todos tenemos a nuestros amigos con nosotros.
Me encontré con Seungmin de espaldas por lo que no lo dudé ni un segundo.
—¡Hola a todos!— Hable en mi idioma mientras me colgaba de la espalda de Seung, este solo río y tomó cuidadosamente mis muslos para que no me cayera, sin que sus manos tocarán en si mi piel.
Eso era lo que más me gustaba de Seungmin, es muy respetuoso con todos, en especial con las mujeres. Siempre ha sido cuidadoso con el tacto que nos tiene a nosotras y la verdad es que agradezco eso.
-Hola revoltosa- saludo Hyunjin riendo, mientras se afirmaba del pecoso australiano que teníamos por amigo
-Hi- dijo en saludo el más bajo, mientras sonreía
-Hola, baby- río Seung, nuestra amistad se basaba en apodos de ese tipo.
Hablamos por bastante rato hasta que tuvimos que entrar a nuestro salón.
El día paso horriblemente lento, con mil cosas que hacer, Hyunjin dramatizando, Felix quedándose dormido en plena clase, Seung y yo molestandonos por que ninguno sabía el nombre de algunos colores que nos mostraban. En fin, fue aburrido pero logramos sobrevivir a eso y ahora son las 5:56 pm. Me gusta que mi casillero siga siendo el mismo del año pasado, ya que esta cerca del de mis amigos, hablando de ellos, estabamos buscando nuestras cosas ya que debíamos irnos a descansar a nuestros hogares. Todo era risas a la salida hasta que comenzó a llover fuerte, muchos de nosotros no traíamos paraguas ni nada de eso, Chae, Aisha y Felix habían sido los únicos que traían, mientras que Hansol, Minghao y Jaehyun los de las chaquetas grandes. Así que cada uno de ellos se fue con sus respectivas parejas y solo Seung, Chang, Jeongin y yo íbamos sin nada. Los últimos se fueron corriendo y riendo, dejándome sola con Seung mientras buscaba alguna solución.
Solo sentí como él me obligaba a caminar nuevamente, pasando su brazo por mis hombros, pero no sentí agua caer en mi cuerpo; me fijé bien en eso y ví que se había quitado su sudadera para cubrirme, dejandose el expuesto. En el camino me lo pasé regañandole porque se iba a enfermar y el hacia caso omiso a mis palabras.
Al llegar a casa simplemente me dijo que me quedara con ella, y yo como compensación le di un paraguas para que al menos no se siguiera mojando en el camino a su casa. Arregle mi ropa al verlo irse y cerré la puerta, encontrando a Han con Minho literalmente comiéndose la boca en la cocina.
—claro, el Rico siempre humillando al pobre— murmure mientras subía a mi habitación para poder cambiar mi ropa.
Me puse un pantalón negro y un chaleco gris, unas pantuflas del mismo color y arregle bien mi cabello. Metí a lavar y a secar la sudadera de Seung mientras miraba esta misma al hacer el proceso.
Sentía una sensación agradable en el pecho, no se por que ni mucho menos que és. Al caer la noche mientras Minho ya comenzaba a roncar yo me terminaba de alistar para dormir. Me mire al espejo ya con mi pijama y todo, notando que esa sensación no se iba y mis mejillas estaban Rojas.
—¿No me va a dar un infarto?— dije tocando mi pecho, pero descarte la idea de inmediato
Analice bien todo lo que ocurrió y llegue a la conclusión de que me había emocionado por lo que Kim habia hecho por mi.
¿Por que?
—¿por que me emociono?— susurre dejando caer mi cabeza sobre la almohada, hasta caer dormida y dejar esa pregunta con la respuesta en mente.