Volumen I: Capitulo 6: Un Poder Escondido

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Si quieres ser fuerte asegúrate de dar todo de ti porque el enemigo no hará menos.

** Cinco días después de lo ocurrido en la capital **

Un invitado llega a la mansión Takedo luego de recibir una carta de parte de Stella.

Trías: -abre la puerta- Sir Adamic, bienvenido. -deja pasar al amigo de su amo-

Adamic: hola Trías, tiempo sin verte -saluda al mayordomo-

Trías: bueno casi no recibimos visitas después de lo que ocurrido en el bosque pero es bueno ver que usted llego sano y salvo.

Adamic: -entra y sigue al mayordomo- si ese día fue de locos, casi como cinco días atrás.

Trías: si, la señorita Stella se preocupo mucho y pidió llamarlo a usted -lo lleva a la habitación principal donde esta Roan en cama y Stella a su lado dormida en una silla-

Adamic: -viendo la escena- ¿hace cuanto esta ahí?

Trías: desde que el amo Roan cayo en cama, ella no se ha movido de este cuarto.

Adamic entro a la habitación y se acerco a Stella de la forma mas silenciosa posible para despertarla.

Stella: -abre lentamente los ojos- Sir Adamic, ya llego. -dijo algo adormitada-

Adamic: tranquila -le ayuda a pararse- ven bajemos al comedor.

Stella: pero ¿y si despierta? -voltea a ver Roan-

Adamic: el no despertara aun, además necesitas comer algo. -la ayuda a bajar e ir al comedor-

Los tres, Stella, Adamic y Trías se reúnen en el comedor, donde el mayordomo le sirve algo de comer a la chica.

Stella: gracias Trías. -sonríe y come-

Adamic: debes de cuidarte tu también, si no lo haces cuando Roan despierte no soportaras su entrenamiento.

Stella: lo sé, lo sé pero cuando el cayó desmayado no supe que hacer -toma un poco de té - además salía sangre de heridas que aparecieron de la nada.

Adamic: no aparecieron, esas heridas fueron las de la batalla.

Stella: -escapándose de ahogar- pero si el no recibió daño alguno cuando peleó contra ese sujeto.

Adamic: -suspira- aún hay mucho que no entiendes.

Trías: bueno no es su culpa, el amo Roan no le ha contado mucho de él.

Stella: ¿De qué hablan?

Adamic: termina de comer y luego te explicaré.

La chica se apresura a terminar su comida para luego ser llevada al mismo estudio dónde Trías le había entregado el libro de los Siete Pecados Capitales.

Adamic: que recuerdos, este lugar pareciera no cambiar. -dijo nostálgico-

Stella: ¿usted vivió aquí también ?

Adamic: si, aquí aprendí muchas cosa -se pasea por el estudio- pero no es por ello que vinimos.

Adamic se acerca a un viejo libro, un libro que tenía en su portada un símbolo raro.

Adamic: este libro cuenta sabré de una antigua raza, una que libro una batalla incesante ante los llamados demonios, la raza de las deidades.

Al abrir el libro por medio de una piedra mágica que había en el se empiezan a ver cómo las imágenes de mueven.

Stella: -maravillada- las deidades...

Adamic: su gobernante, la Suprema Deidad, le encargó a sus cuatro arcángeles más poderosos una magia muy especial la cual se llamaba "Gracia", estas gracias eran: Senkō (destello), Tatsumaki (tornado), Taikai (océano) y Taiyō (sol) está última siendo considerada la más fuerte de todas.

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