capítulo 1 - el club nocturno

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El ritmo palpitante y las luces parpadeantes nos envolvieron a todos, los cuerpos presionados unos contra otros en la pista de baile mientras las bebidas fluían. Pasé otra noche bebiendo y bailando en la discoteca local genérica, caras bonitas y cuerpos tonificados retorciéndose en la atmósfera embriagadora. Excepto que es difícil concentrarse en divertirse en una noche de chicas cuando una de tus amigas está haciendo todo lo posible para ser el centro de atención. Sofía siempre había sido la 'más bonita' de las tres, o al menos así actuaba.

Una vez más, me encontré parada en el bar con mi amiga Chrissy mientras tomábamos nuestros cócteles, mirando fijamente a través de la pista de baile. No tardaríamos en seguir nuestra línea de ojos para ver qué nos molestaba tanto. Una joven en forma en medio de la pista de baile usando su cuerpo para llamar la atención de todos los hombres e incluso de algunas mujeres mientras bailaba. Ella también sabía exactamente lo que estaba haciendo, por qué otra razón llevaría un pequeño vestido negro tan ceñido que mostraba con orgullo su redondo trasero. Cada movimiento era suficiente para sacudir su trasero para que todos lo vieran, el dobladillo de su vestido solo lograba mantenerla decente, ya que se sentaba sobre sus muslos bien gruesos.

"Esto es una mierda". Chrissy gimió mientras se inclinaba hacia mí. "Ella siempre hace este truco, ¡está tan ocupada tratando de sentirse bien en vez de pasar el rato con nosotras!" Solo pude asentir mientras tomaba un sorbo de mi bebida, aunque ella tenía razón. Esta había sido la rutina de todas las salidas nocturnas durante meses, Sofía aparentemente se olvidó de nosotras mientras se ganaba las bebidas gratis y el descanso ocasional mientras nos quedamos con las sobras. Chrissy se volvió hacia mí y se inclinó para susurrarme al oído “Deberíamos hacer algo, ¿sabes? que la involucre a ella ".

Ya podía ver los engranajes girando detrás de sus ojos mientras decía eso, y una parte de mí tenía una idea bastante clara de lo que quería hacer. Verás, Chrissy y yo nos habíamos descubierto en una aplicación de fetiche gordo poco después de conocernos. Definitivamente fue incómodo al principio, pero terminamos acercándonos cuando compartimos nuestro amor por todo la grasa, especialmente lo mucho que disfrutaba burlarse de mí por estar bastante gordita. "Me voy a arrepentir de esto, pero ... ¿qué estás planeando?" Suspiré cuando vi que los ojos de Chrissy se iluminaban y una sonrisa diabólica se formaba.

Ni siquiera obtuve una respuesta cuando se volvió hacia la barra, rápidamente llamando la atención de uno de los chicos lindos atendiendo la barra. No pude descifrar lo que pidió por el volumen de la música, así que simplemente volví a mirar a la multitud. Pasaron unos minutos cuando vi a Sofía moler su culo respingón contra cualquiera que se lo permitiera cuando el camarero regresó con tres jarras grandes de cócteles burbujeantes brillantes. Chrissy ni siquiera me dio la oportunidad de preguntar cuando me dijo que llevara las bebidas a uno de los reservados en la parte trasera del club antes de desaparecer entre la multitud.

Dejando escapar un suspiro por sus payasadas, cargué con cuidado los cócteles a través de la multitud mientras trataba de ignorar cada vez que mi propio culo regordete o mi barriga rozaban a alguien. Dejando las jarras en la mesa antes de que comenzara a arrastrar los pies por el asiento acolchado y ponerme cómoda, no pasó mucho tiempo antes de que Chrissy regresara. Prácticamente estaba arrastrando a Sofia de la mano mientras la conducía a nuestro reservado, tirando de ella hacia el asiento para que estuviera apretada entre las dos.

De hecho, pude ver la expresión de decepción en el rostro de Sofía por haber sido arrastrada fuera de la pista de baile desapareciendo cuando puso los ojos en los bebidas, sin duda despertando la sed de todo su baile. Chrissy empujó una jarra hacia cada una de nosotras, guiñándome un ojo cuando me di cuenta de su plan. Sofía no necesitó mucha provocación para empezar a chupar la pajita con fervor, sólo se detuvo a exclamar lo sabroso que estaba el cóctel de fresa antes de renovar su asalto a la jarra.

Chrissy luego comenzó su siguiente paso del plan, llenando el momento con charlas sin sentido en un intento de distraer a Sofia. Y no podía creerlo al principio, pero en realidad estaba funcionando. Sofía sonrió y asintió con la cabeza mientras escuchaba atentamente todo lo que Chrissy balbuceaba, y con la gracia de un hábil mago, Chrissy rápidamente empujó su propia jarra sin tocar frente a Sofía. Tal vez fue la serotonina de todo el baile, o tal vez tenía tanta sed, pero ni siquiera se detuvo cuando comenzó a abrirse camino a través del segundo cóctel. Una parte de mí se sentía mal por seguir el juego con este pequeño plan, pero no iba a interponerme en el camino de la diversión de Chrissy, al menos que termine a su merced de esta manera.

Una patada repentina en mi espinilla me sacó de mis pensamientos cuando vi a Chrissy mirándome, luego mirando a mi cóctel. Confundida, miré y me sorprendió ver que el segundo cóctel estaba casi vacío. Empujé con cuidado y lentamente mi propia jarra hacia ella y observé con asombro cómo comenzaba a tomar su tercera ración. Mis ojos siguieron cada bocado mientras viajaba por su cuello ágil, más allá de su pecho alegre y hasta su estómago. Tuve que contenerme de jadear audiblemente cuando vi cuán distendida se había vuelto su cintura, la forma en que su vestido se abombaba ligeramente hacia adelante por tanto alcohol.

Las últimas gotas fluyeron hacia su abdomen hinchado cuando finalmente apartó la última jarra, cayendo hacia atrás en un ligero aturdimiento haciendo que su estómago se viera aún más pronunciado. No hacía falta ser un genio para darse cuenta de que todo lo que había consumido Sofía la dejaría completamente aplastada en poco tiempo mientras el alcohol se abría paso por su sistema. Le ofrecí mi mano y froté suavemente su hombro mientras dejaba escapar un pequeño gemido de incomodidad, solo para ser interrumpido con un fuerte eructo. Puede que su cara estuviera roja, pero menos por la vergüenza y más por el hecho de que estaba completamente borracha.

"Vamos chicas, ¿por qué no comemos algo y bebemos un poco de esta bebida?" Chrissy le guiñó un ojo mientras no tan gentilmente sacaba a Sofia de su lugar de descanso. Rápidamente me deslicé y envolví el brazo de Sofia sobre mis hombros mientras la ayudaba lentamente a cruzar la pista de baile detrás de Chrissy. Hice lo mejor que pude para ignorar las pocas miradas mientras la llevaba hacia la salida, pero pensé que una chica ebria no era la primera vez en el mundo en este lugar. Chrissy ya estaba esperando afuera cuando finalmente salimos, agarrándonos a los dos de la mano y llevándonos a un local de comida rápida al lado.

Ahora, para ser justas, no creo que haya estado antes en este lugar mientras todavía estaba relativamente sobria, pero era difícil ignorar el abrumador aroma de la comida grasosa que flotaba en el aire. Debe haber sido bastante temprano en la noche, ya que las tres éramos las únicas clientes dentro, y sin embargo, mientras miraba el mostrador, vi dos bolsas de papel marrón llenas ya, y el hombre detrás del mostrador ya estaba llenando un tercio. "¡Nos compré a todas un poco de todo!" Chrissy sonrió, sus verdaderas intenciones ocultas a Sofia. La pobre chica estaba luchando por mantenerse despierta, no importa en posición vertical sin mi ayuda.

Una Noche De PasiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora