Capítulo 26: La llegada

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NARRA NATALIA:
Ya han pasado ocho meses desde que supe que estoy embarazada de mis hermosos gemelos, estaba nerviosa ya que muy pronto llegaría el día de dar a luz y la verdad me daba miedo que algo pasara. Todos estos meses Carlos no se ha separado de mí, supe que tendríamos niñas, y hace pocos meses las chicas me ayudaron a comprar todo lo necesario para la llegada de las niñas, hace unas semanas Carlos y James pintaron las dos habitaciones para las niñas y a amueblarlas. Ahora estoy las chicas conversando sobre los nombres para las niñas, mientras los chicos estaban en la sala viendo el partido de futbol.
Antonia: Y si las llamas Ashley y Whitney
Natalia: Es que no que sean nombres tan engreídos
Catalina: Ya se, ponles Alexa y Valentina
Javiera: A mí me gustan
Natalia: Si, faltan los segundos nombres
Antonia: Alexa Stephanie y Valentina Belén
Natalia: Si... ahora ¿qué quieres.....? *No termine debido a una contracción, lo que hizo que las chicas se asustaran*
Javiera: ¿Qué pasa? *Dijo alterada*
Catalina: ¿Qué no ves que está dando a luz? *Salió y se puso en el marco de la puerta*  ¡CARLOS, JAMES VENGAN, NATALIA ESTÁ DANDO A LUZ! *A los segundos los chicos aparecieron en la puerta, Carlos me tomo en sus brazo, me subió a su auto y partió al hospital lo más rápido que pudo*
Carlos: Tranquila todo estará bien
Natalia: Esto duele *Dije quejándome y gritando de dolor*
Carlos: Tranquila ya llegamos *Apago el auto, me tomo en sus brazos y entro desesperado al hospital* ¡Ayuda mi mujer está dando a luz! *Rápidamente llegaron unas enfermeras junto con una doctora y una camilla*
Doctora: Rápido póngala aquí *Carlos me dejo en la camilla y rápidamente me adentraron a la sala de partos, la doctora se puso guantes al igual que el resto de la gente que estaba ahí, yo gritaba cada vez más fuerte* Tranquilízate querida, escúchame, quiero que pujes
Natalia: No puedo... me duele **Dije al borde  de las lágrimas*
Doctora: Tranquila, puja tu puedes *Me alentaba, comencé a pujar hasta que sentí que mi primera niña salía, eso solo me alentó a seguir cada vez más fuerte hasta que sentí que salió* Bien ya salió sigamos con la siguiente *Seguí pujando por lo menos unos cinco minutos más hasta que sentí que ya salía mi otra nena* Bien querida, ya salieron las dos niñas *Luego me devolvieron a una sala y ahí me quede dormida, hasta que sentí que alguien a mi lado me hablaba, abrí los ojos y vi a Carlos, Catalina y Javiera a mi lado*
Carlos: Despertaste *Me dice muy feliz*
Natalia: ¿Dónde están mis hijas? *Pregunte adormilada*
Catalina: Le diré a la enfermera que las traiga *Dijo para luego salir*
Natalia: ¿Ya las vieron?
Carlos: No, queríamos verlas junto con tigo *En ese momento entraron el resto de los chicos y detrás de ellos venían Catalina, la enfermera y dos niñas*
Catalina: Aquí tienen *Me paso una y la otra a Carlos*
James: ¿Y cómo les pondrán?
Natalia: Estaba pensando en Alexa Stephanie y Valentina Belén
Carlos: Me encantan *Dijo mirando a la pequeña en sus brazos*

 me duele **Dije al borde  de las lágrimas*Doctora: Tranquila, puja tu puedes *Me alentaba, comencé a pujar hasta que sentí que mi primera niña salía, eso solo me alentó a seguir cada vez más fuerte hasta que sentí que salió* Bien ya salió sigamos...

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*Seis meses después*

  NARRA CARLOS:
Estaba en mi casa junto con mi pequeña Alexa, mientras Natalia estaba dándole de comer a Valentina, la verdad es que ambas se parecían a su madre. Cuando termino de darles de comer las fuimos a acostar cada una en su cama. Bajamos y nos sentamos en el sofá a ver televisión, al prenderla estaban dando la película "Los pingüinos de papá", al terminar vi que Natalia estaba dormida, la tome en brazos y la subí a nuestra habitación, le saque la ropa, la deje en ropa interior y le puse un pijama y la acosté para luego hacerlo yo a su lado. A la mañana siguiente desperté y no vi a Natalia, baje a la cocina y la vi dándole de comer a Alexa mientras Valentina estaba en su coche, me acerque a ella y la abracé por atrás y le di un beso en su mejilla.
Carlos: Buenos días
Natalia: Buenos días ¿Cómo amaneciste?
Carlos: Un poco mal al no verte a mi lado *Dije haciendo puchero*
Natalia: Es que las niñas estaban llorando y no te quería despertar
Carlos: Está bien... oye ¿Qué te parece si luego de desayunar las invito a un hermoso lugar?
Natalia: ¿Dónde?
Carlos: Es un sorpresa ¿Aceptas?
Natalia: Mmmm, ¿qué piensan niñas? *Miro a Alexa y después a Valentina*
Carlos: Ella dice que si *Dije viendo como Vale reía*
Natalia: Está bien, déjame vestirme y te hago el desayuno *Dijo poniendo a Alexa al lado de su hermana, subió al cuarto y en diez minutos bajo a preparar el desayuno mientras yo me subía a bañar y en cinco minutos baje y vi a Natalia terminando de preparar a las niñas para salir*
Carlos: Se ven hermosas
Natalia: Gracias, desayunemos que ya está listo
Carlos: Como quieras *Dije para luego sentarnos en la barra de desayuno, al terminar nos subimos al auto y conduje treinta minutos para llegar al dichoso lugar de mi sorpresa* Aquí es *Dije aparcando el auto*
Natalia: Carlos... es hermoso *Dijo con los ojos llenos de lágrimas por la felicidad*
Carlos: Pensé que te gustaría volver al lugar de nuestra primera cita
Natalia: Claro que me gusto
Carlos: Cuando nacieron las niñas pensé que después de la llegada tenía que traerlas al lugar donde pasamos el mejor día se nuestras vidas
Natalia: Bueno vamos a recordar esos días *Salimos y nos pusimos los trajes de baños que traía en el auto, todo el día estuvimos en el agua, cargaba un rato a las niñas y otro a Natalia que aún no sabía nadar, al terminar el día las niñas se durmieron y nosotros aprovechamos para adentrarnos en la cascada al caer el sol decidimos salir, nos secamos y vestimos para ir rumbo a la casa, al llegar dejamos a las niñas en sus respectivas camas, al terminar de bañarnos nos acostamos y empecé a besar y abrazar por la cadera a Natalia* ¿Qué haces?
Carlos: Quiero disfrutar está noche *Dije acariciando su estómago*
Natalia: No lo sé *Me dijo picara*
Carlos: Ándale, desde que estabas embarazada no lo hemos hecho *Dije insistente*
Natalia: Está bien *Dijo feliz, se puso arriba de mí y me empezó a besar con mucha pasión*
NARRADOR OMNISCIENTE:
Mientras ambos se besaban con mucha desesperación por el placer y la excitación del momento se empezaron a desnudar, quedaron en ropa interior, Carlos le quito el sostén de Natalia y empezó a masajear uno de sus pechos mientras lamia el otro, ella solo gemía mientras se movía sobre el miembro de Carlos para excitarlo aún más, cuando Carlos vio que su excitación no pudo más volteo a Natalia, ahora quedando ella debajo de él, le bajo sus bragas con los dientes y se quitó los boxers y acomodo las piernas de ella alrededor de las de él y la penetro con suavidad al principio y poco a poco iba más fuerte, ella solos gritaba y gemía lo que para Carlos era música para sus oídos. Al ver que ella estaba por correrse salió de ella y empezó a lamer toda su feminidad y metiendo su lengua en el clítoris de ella, lo que hizo que ella se corriera y gritara muy fuerte por el placer, Natalia aburrida de que él llevara el control de todo esto se separó e hizo que Carlos se sentara en la cama, ella se hinco en frente de él y empezó a lamer y meter todo su masculinidad en la boca de ella hasta él se corrió en su boca y ella se tragó todo su liquido saboreando cada gota. Siguieron toda la noche hasta que se acostaron abrazados y tapados por una sabana roja.  

Un Amor Difícil (Carlos Pena)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora