Señora beelzebub

Capitulo 3

"¡Totalmente aniquilado!"

Kaito jadeó cuando se despertó sobresaltada por el grito de Tatsumi. Gruñendo, lo miró con los ojos entrecerrados a través de los rayos de sol que entraban por la ventana. Estaba sudando y jadeando. Normalmente a ella le habría gustado verlo si no fuera por la expresión asustada de su rostro. Ella asumió que tenía una especie de pesadilla.

"¿Tatsumi?" Gritó Kaito.

Miró a Beel, que estaba acurrucado entre ellos. No importa cuántas veces los tres durmieron aquí, Kaito no podía olvidar cómo se las arreglaron para encajar sin que uno de ellos se cayera de la cama.

"Tengo que encontrar a alguien más que lo lleve". Él murmuró.

Parpadeó un par de veces antes de suspirar, luego rodó fuera de la cama y se estiró. Escuchó un leve sonido ahogado detrás de ella cuando lo hizo. "¿Mmm?"

Tatsumi miró hacia otro lado con las mejillas rosadas. Kaito se rió y luego se arrastró sobre la cama, evitando a Beel, y se acercó a él, colocando un ligero beso en sus labios. Ella pensó que era lindo cómo él todavía se avergonzaba cuando todo lo que usaba para dormir era una de sus camisetas y su ropa interior, a pesar de que él ya la había visto en mucho menos. Sin embargo, esa fue probablemente la razón por la que se puso tan nervioso. Le divierte lo mojigato que podría ser el Ogro Enfurecido .

Kaito se levantó y se quitó la camisa. Le encantaba usar la ropa de Tatsumi solo por el hecho de que olían a él. También tenía la sospecha de que Tatsumi secretamente disfrutaba viéndola usar su ropa. Se puso el sostén que se había desechado la noche anterior (esas cosas eran incómodas para dormir). Sabía que su novio la estaba mirando, así que hizo un espectáculo de vestirse con su ropa, que resultó ser el uniforme de los niños de Ishiyama. Que espera su llevar una falda? Ja, sí, claro. Sobre su cadaver. Tragó saliva de forma audible y se levantó de la cama, recogió su uniforme y se dirigió al baño para cambiarse.

Ella se rió cuando dijo, "Mojigata".

Kaito se inclinó para ponerse los zapatos mientras Hilda le daba instrucciones a Tatsumi sobre cómo cuidar adecuadamente al bebé Señor Demonio. Ella se aseguró de prestar atención porque estaba segura de que él lo olvidaría o lo ignoraría.

"Oye. ¿De verdad lo entendiste?" Hilda le preguntó a Tatsumi quién se estaba poniendo los zapatos.

"Sí ... Aliméntalo cinco veces al día, ¿verdad?"

"Esto es suficiente para tres tomas. No lo olvides". Hilda dijo mientras sostenía una bolsa hacia él.

"¿Ordeñar esas ubres tuyas?" Hilda le arrojó un zapato de tacón alto a Tatsumi, aunque Kaito tenía que decir que se lo merecía. Nunca llames vaca a una chica. Como siempre. Probablemente morirá poco después.

"La leche en polvo es más adecuada para la realeza". Añadió Hilda.

"¿Entonces tus pechos están secos?" Una vez más, Hilda le arrojó otro zapato de tacón alto a Tatsumi.

"Escucha. La leche debe tener la temperatura de la axila de un wyvern que vive en el lago Midloche en el Mundo Demonio".

"¡¿Cómo diablos debería saber eso ?!" Tatsumi gritó mientras miraba a Hilda.