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Tiempo anterior
"Raúl, llegué a la ciudad. Quiero verte hermano, tengo que presentarte a alguien."
Mi celular se iluminó dejándome ver dichas palabras, mi mejor amigo José Miguel o Jos para todos, finalmente había regresado a Ciudad de México después de varios años en Seúl y seguía con el afán de llamarme Raúl, seguramente estaba emocionado ya que solamente me llamaba así cuando tenía mucha emoción dentro de él.
Tomé las llaves de mi auto, no sin antes despedirme de mi madre con rumbo al restaurante donde Jos me había indicado, el clima de ese día de julio era agradable, perfecto para escuchar a The Weeknd o Dua Lipa.
Llegué a mi destino y al buscar con la mirada a mi amigo, lo encontré en una mesa sonriendole a una chica, desde mi lugar solamente podía observar su largo cabello castaño con mechas de colores.
Jos al mirarme se levantó y ambos caminamos hasta encontrarnos para poder abrazarnos, había extrañado a ese cejón.
- Hermano te extrañé mucho, ven, que quiero presentarte a alguien especial - Me sonrió para dirigirnos a la mesa.
El brillo de sus ojos era demasiado y su sonrisa podía verse desde varios metros de distancia. Al llegar a la mesa, la chica volteó a mirarnos, definitivamente era preciosa, en mi mente me la imaginé asiática pero no, era muy latina, tenía unos preciosos ojos cafés, su sonrisa estaba decorada con unos brackets, su cabello totalmente lacio indicaba que la mitad de su cabello estaba teñida de colores y su frente era cubierta por un flequillo delgado.
- B ella es mi prometida _______ Villalpando, es hermana de Alonso, amor, él es Bryan, mi mejor amigo - Jos nos presentó y ella se puso de pie, pude notar que medía unos 20 centímetros menos que yo, no era ni tan bajita ni tan alta, con razón se me hacía conocida, ya la había visto en fotos en la casa de Alonso, mi amigo de la universidad, él vino a estudiar a Ciudad de México mientras su familia se encontraba en Monterrey.
¿Han sentido como se mueve el estómago cuando tienes mucha hambre y sientes muchos fuegos pirotécnicos a tu alrededor? Pues yo sí, lo sentí en ese momento, esa chica era especial ¿Lo malo? Era la chica de mi mejor amigo.
- Hola mucho gusto, Jos y Alonso han hablado mucho de ti, ya quería conocer al famoso Bryan - Me sonrió, esa maldita sonrisa que me ha atrapado completamente y que iba a convertirse en mi perdición.
- El gusto es mío - Le devolví la sonrisa y noté un ligero sonrojo en sus mejillas - Cuéntenme ¿Qué tal Seul? - Cuestioné.
- La empresa es increíble hermano y la ciudad ni se diga, tienes que ir un día a conocer... - Jos me miró.
Sinceramente dejé de prestarle atención al chico de la silla contigua a la mía para perder mi mirada en unas delicadas manos que reposaban sobre la mesa mientras sus dedos pulgares jugaban tiernamente, rara vez asentía simplemente para que Jos no hiciera un drama por qué no le ponía atención.
