No lo se, simplemente me enamore

4.Directo al Córazon

Había perdido la voz por completo, sabía que no estaba soñando porque su mirada todavía seguía fija en mí.

Trato de decirme algo, pero una voz de fondo nos sorprendió.

-No interrumpo nada ¿Verdad?- la voz de Ricky me sacó del trance en el que estaba.

James se apartó rápidamente dirigiéndose a la salida, pero antes de que se fuera, mi voz regresó.

-¡James!- le grité.

Mi voz lo detuvo antes de que saliera huyendo del almacén, se detuvo en la salida pero no me miró a los ojos.

-Gracias por lo de hoy de verdad salvaste mi vida-

No hubo respuesta de su parte así que sólo pude ver su sombra alejándose.

Ricky me miraba con una mezcla de preocupación y asombro, sabía que se había quedado sin palabras, porque conociéndolo ya me habría dicho algún comentario sarcástico. Tuve que ser yo la que rompiera el hielo.

-¿Tan mal me veo?, o ¿Porque tu cara de poker?- No pude contener la risa, mientras le arrebataba mi inhalador.

-¿Qué hacían James y tú?- me lanzó una mirada acusadora.

-N..nada, sólo me tranquilizaba ya que me puse muy mal, sabes lo que me pasa cuando entro a lugares llenos de polvo y sin ventilación-.

-Sí, claro Lea, sino fuera porque te conozco tanto juraría que aquí pasó algo más, pero no te presionare hasta más tarde cuando las pruebas terminen- me guiño un ojo, mientras me ayudaba a pararme.

-¡Es verdad las pruebas!- Grite emocionada.

-Tranquila mini Pele, apenas están llegando los nuevos, todavía tenemos tiempo tu tranqui ok, además no te vez muy bien, pareces un fantasma uuhh uuhh- Nos soltamos a reír.

-Ok, ya basta de tus bromas, tu sí que eres experto en levantar el animo de las chicas-

-Toma esto y apresurate ya quiero ver al nuevo equipo campeon- le dije a Rick mientras aplaudía de la emoción.

Ricky me ayudó a llevar la balonera y cualquier cosa que pudiera ser útil en la prueba. Trate de controlar todos los escalofríos que sentía después de aquel mágico beso, para que el inquisidor Rick no notara lo emocionada que estaba.

De camino al campo de futbol, seguía sin creer que James me hubiese besado, ese era mi primer beso así que era muy importante para mí, de fondo podía oir a Rick contarme algo pero no le preste atención, todavía tenía en mi mente la mirada tan dulce de James, aunque pude notar cierta tristeza, quiza melancolia.

Cuando por fin llegamos al campo, el ambiente era inmejorable, los del equipo bromeaban con los novatos y se podía notar que este iba a ser un gran año para nuestro equipo.

Hank habló y comenzó a organizar los grupos que se iban a enfrentar, así que despues de conocer su equipo, tenían que entregarme su solicitud, me sentí como en la peli de triunfos robados.

Uno a uno fueron entregandome sus hojas, hasta que note la presencia de alguien conocido, lo cual hizo que me congelará al instante, ¡era James!, sólo que esta vez sonreía y bromeaba con los demás.

Su sonrisa era perfecta, se le formaban unos pequeños hoyitos en las mejillas que lo hacían lucir encantador, ademas de que combinaban perfecto con su linea de ojos, pero sus labios lucían tan comestibles y suaves que no pude evitar sonrojarme al mirarlos.

Todo este tiempo creí que odiaba a la gente, pero creo que estaba muy equivocada, se integraba perfecto con los demas que daba la impresion de ser amigo de ellos de toda la vida, por un momento sentí celos al verlos platicar, así tan casuales.

Lou nuestro portero estrella, me dio un codazo y yo regrese a mi pose de secretaria.

Cuando escuche el nombre de James quise no mostrarme nerviosa asi que me relaje todo lo que pude, estire la mano para recibir su hoja sin hacer contacto visual por supuesto pero el roce con su mano hizo que volteara a verlo automaticamente.

-Veo que ya estas mejor- Su dulce voz me dejo sin palabras.

Asentí rapidamente.

-No vuelvas a preocuparme así otra vez- me susurro y se alejó.

-¿Que fue lo que dijo?- pense en voz alta mientras lo seguía con la mirada.

Tal vez la falta de oxígeno me había hecho alucinar esas ultimas palabras de James, pero mi corazon no creía que fuera una alucinación.

El primer partido comenzó, los cuatro equipos ya conocían las reglas, quíen metiera dos goles se quedaba y entraba inmediatamente el otro equipo, y así sucesivamente hasta que todos los equipos hayan pasado.

El equipo de James iba primero, en contra del equipo de Mike, cada uno fue asignado como cápitan. La  presencia de cada uno daba a notar que ninguno quería perder, este encuentro pintaba ser muy entretenido.

Antes de que comenzará el juego, me dirigí a las gradas para poder ver mejor, no quería perderme ningun movimiento de James. Noté que una chica de cabello largo y brillante se acercaba a las gradas tambien, no era muy alta pero tenía una linda figura que la hacía resaltar, inmediatamente atrajó la mirada de varios chicos, incluso de James.

El silbato sonó y el balón rodó.

Los dos equipos eran muy buenos ninguno cedía ante el otro, yo estaba completamente sorprendida del poder de los capitanes, jamas habia presenciado un partido tan intenso.

James llevaba el balón a toda velocidad dejando uno a uno a los contrarios, mi corazón latía con tanta fuerza que sentí que se me iba a salir.

Y tal parece que no era la única en sentir emoción, la despanpanante curvilinea aplaudía y gritaba cada vez que James tenía el balón, mis celos explotaron cuando él le lanzó una sonrisa fugaz.

El primer gol lo metió James. Estaba tan emocionada que me pare y aplaudi como loca, durante su festejo él volteó e hizo una dedicatoria con su mano, por un momento me sentí en las nubes, ya que pensé que me lo dedicaba a mi, pero cuando la loca de átras le lanzó un beso, caí en la cuenta del mega oso que hice.

Al final Hank tuvo que darle el gane al equipo de James.

Los chicos estaban tan acalorados que se quitaron sus playeras, así que no pude evitar abrir la boca al ver el cuerpazo que tenían todos, Ricky notó mi mirada de pervertida a lo lejos y me lanzó un güiño, no pude evitar sonreír.

Hank juntó a todos los chicos en un círculo para darles las noticias de los nuevos miembros.

-Gracias por haber participado en las pruebas chicos, lamentablemente para mi, no todos podrán formar parte de nuesro equipo, pero no se den por vencidos muchos de ustedes todavía necesitan practicr y pulir sus habilidades, estoy seguro que la proxima temporaa sin duda estaran en nuestro equipo- Hank sabía como motivar  a toda una multitud, esa era una de las cosas que admiraba de él.

Uno a uno fueron sonando los nombres de los elegidos, dentro de mi cruzaba los dedos para ver en ese sexy uniforme a James.

Cuando escuche su nombre, la mirada se me ilumino, sabía que tenía una oportunidad de conocerlo más ahora que iba a estar en el equipo, y no iba a desaprovechar esa oportunidad.

-¿Y esa sonrisa tan brillante?-

Voltee y vi a James.

-Me alegró el que te hayan elegido- le conteste sonriendo.

-¿Te alegró?- contesto sorpendido

Cuando iba a contestarle escuchamos una vocecita que poco a poco se acercaba a nosotros, él parece quela reconocío porque me hizo a un lado para correr a los brazos de la melenuda curvilinea de las gradas.

Sentí mi instinto asesino salir de mi cuerpo.

Voltearon a verme y con sus caras de felicidad, me dieron ganas de ponerme en medio y separarlos, sabía que

James no era nada mío, pero no hace mucho me había besado, eso debía contar ¿no?

¿Era su novia? Si era así no debío besarme, yo no iba a ser la amante.  ¿Porque no me decían nada? ¿Quien era esta quita futuro novio?