El mejor error que pude cometer

Tu sigue que nadie te detenga

Es muy difícil decir adiós a las personas con las que he pasado muchos acontecimientos. Creo que lo más difícil es el cambio de horario, porque de por si todos tienen un horario atareado. Será complicado encontrar un espacio que coincida para hablar. Pero si mi padre lo logró hacer por años cuando trabajaba afuera y la tecnología no estaba Yam desarrollada como ahora. Sin embargo, necesitas que ambas persona hagan el espacio, de lo contrario siempre existirá una excusa para no lograrlo. Así fue como me di cuenta que a veces tiene que seguir avanzando aunque no tengas una persona a tu lado, los caminos que toman son distintos y es una incertidumbre si llegan al mismo lugar.

~Recuerdo~
La tarde de Domingo era serena, la lluvia caía, hacia un poco de frío, nos encontrábamos con Nicolás recostados en el sillón viendo una película. Nicolás es mi novio, llevamos 1 año 3 meses juntos, es un chico muy amable y simpático, nos conocimos en la universidad llevábamos clases juntos desde el primer año, pero el tenía novia en ese entonces. Nos distanciamos un poco y luego a finales del ultimo año de universidad nos volvimos a topar. Ambos coincidimos en el trabajo, comenzamos a ser muy cercanos y nos enamoramos, pero hace poco él se fue de la empresa para intentar en otro campo. Se siente extraño no tenerlo todo el tiempo, aún así logramos vernos los fines de semana.

"No es como quinceava vez que ven Shrek 2" — exclamó irritada mi hermana menor, Kate, ¿que mosco le picó ahora? De vez en cuando chocamos, eso se debe a que nos llevamos 1 año y medio de diferencia.

"¿Te hace daño que la vuelva a ver? Si no quieres verla ahí está la puerta mujer." — respondí irónicamente, ante su mal humor. Hace poco se mudó conmigo, ya que el apartamento que rentó se encuentra más cerca de la universidad que la casa de nuestros padres.

"¿Ahora que te hicieron colocha?" — le preguntó Nicolás poniéndole pausa a la película, lo volteé a ver y fruncí el seño. El solo me sonrió y continuó la plática con mi hermana. Dirán que soy un poco egoísta, pero muchas veces mi hermana exagera por todo, piensa que es el fin del mundo, pero en realidad solo es un mal trago.

"Había quedado con un amigo de juntarnos a tomar un café... ¿y que crees? Me cancelo a última hora. Que descaro no crees, enserio que la gente no debe ilusionarlo a uno. Sabes lo difícil que es para alguien introvertido tomar valor y salir a socializar... necesito un trago." — dijo Kate alterada, okay, si le afectó esta situación, y tiene razón cuesta que agarre valor para ir a socializar. En eso si somos diferentes, pero bueno así nos queremos y nos complementamos.

"Yo apoyó la noción, vamos a la cocina" — exclamé poniéndome de pie para ir a la cocina, Nicolás solo se me quedo viendo y movía la cabeza de lado a lado en modo de negación.

"Ya está grande Nicolás, ella sabe lo que quiere. Así que no me veas así." — agregué mientras caminaba hacia la cocina, aunque ahorita que recuerdo, no se si tengo cervezas, creo que solo tengo vino.

Ellos me siguieron a la cocina, abrí la puerta del refrigerador y comencé a buscar las cervezas que le gustan a Kate. Ambos tomaron asiento en la isla de la cocina, y continuaron platicando, principalmente Nicolás escuchaba a Kate desahogarse. Lastimosamente no había comprado cerveza, tenía sólo media botella de vino y 2 six-packs de leches de sabores, no me juzguen estaba en oferta del 2x1. Nunca se desperdicia una oferta del 2x1.

"Me temo que solo tengo vino..." — logre decir dándome la vuelta para verlos. De repente Kate se levanta de su asiento y camina rápidamente a tomar una de las leches de sabor a fresa.

"Yo quiero esta, tengo años de no tomar una de estas..." — agregó abriendo la leche y tomando de ella. Mi expresión de confusión fue tan graciosa, que Nicolás se comienza a reír sin parar. Yo diciendo que está grande y ella toma una lechita... bueno yo fui la que las compro después de todo.