La rosa y el caballero.

IV

Los hermanos Uchiha parecían llevarse tan bien, yo en verdad lamentaba que Hana y yo no hubiéramos tenido ese contacto, pero cuándo mi prometido se acercaba a mí, por instinto sólo podía preguntarle ¿A qué había venido? Sus ojos negros tan diferentes a quiénes se marchaban, me analizaban y al pedirme tutearlo no era algo propio y menos si ni siquiera lo había tratado, además no sé cuánto habría cambiado desde que yo me fui.

—Lo siento, pero no podría, le repito ¿A qué a venido Hatake-san? Usted es alguien muy responsable y..

—Contigo todo es imposible cariño, me gusta que te preocupes por mí, pero ahora olvídate de eso, vine a invitarte a comer y pasear por ahí juntos, en poco tiempo serás mi mujer y no se nada de ti..

—Pero yo..

—Por lo que veo las clases terminaron ¿Nos vamos?

Su negra mirada era tan diferente a la de Itachi Uchiha, pero no era hora de pensar en eso, además de que obviamente no podía negarme, estaba segura que si no era hoy sería mañana. —Está bien, iré por mis cosas..

—Aquí te esperó..

Y al avanzar hacia el salón, lo veía sonreír. Lo último que veía era como los niños lo rodeaban saludándolo, se que era mi prometido, pero no me sentía segura de estar con él y menos a solas, pero que le iba a hacer, después de todo ya no podía disculparme con Itachi.

[...]

Llegaba molesto a casa, Sasuke se la había pasado hablado durante todo el camino, pero yo no le había puesto atención y cuando nuestra madre nos daba la bienvenida diciendo que la comida estaba lista, me disculpaba con ella, pero la verdad era que hasta el hambre se me había quitado de imaginarla con él a solas..

Al encerrarme en mi habitación, tenía que calmarme, obvio no podía montar una escena y menos por celos ¿Acaso ella lo quería? Hasta dónde sabía él era muy popular con las chicas, maldita sea..

Me recostaba tratando de pensar en otra cosa, pero solo podía recordar su voz, su largo cabello, su olor y el saber que ellos estaban juntos, sentía que la sangre me hervía, relájate Itachi esa es la primera regla, analiza la situación -cerraba mis ojos- tratando de concentrarme y al respirar profundo..

¡¡Qué vivan los señores de la aldea!! ¡¡Qué vivan!!

Y ahí

No eso no podía ser, no lo iba permitir y al acercarme a ellos..

—Niisan ¿Qué ocurre? Despierta..

Al abrir mis ojos, estaba sudado, agitado y frente a mi veía a mi hermano observarme preocupado —Sasuke ¿Qué ocurre?

—Creó tenías una pesadilla Itachi, gritaste muy feo, ¿Qué soñaste?

Ni cuenta me di cuando me quede dormido. De seguro por estar tan molesto soñé eso. —No lo recuerdo Sasuke, pero creó que si fue un mal sueño..

—Pues claro que sí, apretabas la almohada con coraje, tanto que a penas pude quitártela y luego despertaste..