–Agustina -Me presenté y agarré el vaso para tomar otra vez.
–Eu no te parece mucho? Digo, no soy quién para controlarte como tomas, pero te va a hacer mal y por lo que me dijiste viniste con tu amiga y ella está mucho peor que vos
Iba a responderle pero todo me empezó a dar vueltas y antes de caer al piso me agarró de la cintura y los brazos haciendo que yo me aferre a él para no caerme.
–Sabés de alguien que no esté en pedo y que te pueda llevar? Lo haría yo, pero soy un completo desconocido, no quiero que te sientas incómoda -Dijo preocupado.
–No tuve que tomar tanto -Lo abracé y por poco no me dormí.
–Eu eu eu, no te duermas, mirame -Me movió para que lo mire y buscó con su mirada algo en la cocina.
Me hizo dar unos pasos para atrás y me dejó apoyada en la mesada mientras agarraba un vaso y lo llenaba de agua.
Me lo dió y buscó en la heladera algo.
–No es tu heladera, o si? Porque no podés meterte en cosas de los demás -Tomé del vaso y me miré las manos, había manchitas raras en estas y te perdías fácilmente. O era porque tenía más alcohol que sangre en este momento.
–Es mi heladera, me la traje en moto -Contestó divertido para después volver a hablar.- Querés algo para comer? Asi no te dormís
–Empanadas -Hablé feliz.
–Tuviste suerte que hay -Sacó un platito con dos empanadas del microondas y me las dió.
Esperó a que terminara de comer y me miró.
–Ahora, con quién puedo hablar para que te lleve a tu casa?
–Con Mar, vine con ella -Moví mis piernas cual nena chiquita sobre la mesada.
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Wendiaaa
No sé si lo dije en el capítulo anterior, pero mi gato está desaparecido y por eso no actualizo casi nada en estos días, pero ahora estoy un poquito mejor asique es probable que les actualice algo.
En fin, perdón por siempre poner excusas, es que me surgen muchas cosas imprevistas cuando digo que voy a actualizar. Bueno, lxs amo❤️.
