★ La preparatoria Spainrp ★

★ Primer día ★

★De repente su despetador sonó haciendo que el rubio se despertará de repente. se levantó en un abrir y cerrar de ojos desarmando toda la cama, tirando la almohada al piso, las sabanas desparramadas y humedas por el llanto de anoche. Corrió hasta el baño descalzo y despeinado, se peino rápidamente, se cepillo los dientes, se lavó la cara, se cambió, agarró sus cosas y se fue cagando leches hacia la escuela.

mierda,mierda

Pensaba. Solo podia culparse a si mismo por llegar tarde al colegio, si no fuese por su estúpido insomnio no estaría en esta situación.

-Soy un pelotudo- dijo para sus adentros mientras corría y corría sin parar, pensando sobre su futuro castigo por llegar tarde al primer día de clases.

Cuando llego, agitado sudoroso y cansado se sentó en la vereda al lado de la puerta de colegio para descansar. Luego de su mini recreo se levantó y entró al edificio sin pensarlo dos veces.

escuchaba

silencio y más silencio, pasillos altamente silenciosos. Lo más probable es que todos estén en sus respectivas clases escuchando a una persona dar su aburrida lección.

A Raul la escuela siempre le había parecido un desperdicio de tiempo en su máximo resplador. No es un secreto que a la mayoria de las personas les aburren las lecciones que dan los maestros y maestras para que uno aprenda algo que no volverá a usar en su vida.

Eso pasaba por la cabeza de Rúbier mientras se dirijía a su salon a paso rapído.

El rubio ya estaba enfrente de la puerta de su salon. Nervios y preocupación eran las palabras que describian a la perfección el estado emocional de Raul.

Se armó de valor y con miedo abrió la puerta lenta y dolorosamente. Para su mala suerte aquel objeto rechinaba como si su vida dependiera de ello. Las miradas juzgadoras no tardaron en mirar a Raul quien solamente bajaba la cabeza y cerraba la puerta lentamente. Su maestra no tardo en llamarle la atención por alborotar a toda la clase y haber llegado tarde.

El rubio avergonzado de si mismo se fue a su asiento aún cabizbajo y con las penetrantes miradas de sus compañeros que en silencio se burlaban de el.

Ya en el receso Rubier estaba a un lado apartado en un rincon, viendo a sus compañeros charlar de cualquier cosa que no era de su absoluto interés personal. Logro divisar a lo lejos del patio a su irreconocible amigo de cresta blanca junto con el rubio. Horacio iba a toda prisa a abrazarle, a su vez Gustabo iba a paso lento mientras miraba el cielo, como si en este encontrara las respuestas que le resoverian la vida.

El de cresta blanca se lanzó sobre Raul haciendo que este se callera de culo contra el piso, sin embargo lo abrazo también disimulando un poco su dolor. Los 2 se abrazaban fuertemente, como si no se hubieran visto desde hace 10 años, a Gustabo no le gusto mucho esta acción por parte de ambos individuos.

-¿Acaso sois novios o que?- Dijo el rubio molesto mientras los miraba con mala cara

- Calmate no seas tan celoso - se quejo el de crestas aún abrazando a rubier quien tampoco se veia muy interesado en separarse de Horacio

- Venga vamos no empiezes con que soy celoso, literalmente estas encima del pobre chico me lo vas a asfixiar - Se quejo el oji celeste

- Gus estoy bien no pasa nada - Dijo rubier con la voz un tanto desanimada

Horacio se percato se aquel tono triste de Raul, ante esto se le quito de encima y se sentó a su lado mientras Gustabo imitaba su acción.

Raul habia quedado en el medio de estos dos, se sentia bastante cómodo encerrado entre ellos, sin embargo se seguía sintiendo juzgado por el suceso tan vergonsozo que le había tocado vivir. Rubier miraba directamente al grupo de sus compañeros, se divertian haciendo bromas lo más probable. El en cambio seguia mal por todo, no solo por lo de hacia rato sino por su pasado en general.

De repente como por arte de magia, vio a un chico moreno de pelo negro, alto, con una sonrisa malvada pero a la vez agradable para Raul. El rubio se habia quedado perplejo ante aquel ser que esta acompañado de un chino pelirojo, bajo y un chico castaño de ojos verdes. Los cachetes de aquel rubio estaban de un tono carmesi y sus amigos no dejaron pasar por alto esto.

-¿Raul? que cojones te pasa?- pregunto con curiosidad el chico de campera roja y ojos azules

- q- que¡?- respondió sorprendido

- uhhhhh, Raul estas enamorado?- pregunto el peli blanco

- QUE¡¡???- No chabón que estupides decis flaco¡?- dijo enojado el rubio

-Pues estas todo sonrojado- dijo el de ojos azules

- Tengo frío - se quejó

-...-

-Raul hace 35° grados...-★