Estabas en un viaje con tus compañeros a las montañas.
Pero algo impidió que llegues a tu destino.
Y no tienes recuerdo alguno de lo ocurrido.
Cuando finalmente estás consciente te encuentras con unas personas, mejor dicho, unos seres que nunca habí...
Ibas caminando con cierta tranquilidad en dirección a donde te habían indicado los gemelos y te guiaba la brújula.
-"Sólo debo seguir por este camino...y llegaré... No hay nada de que temer..."
Para que hablaste.
Te sorprendiste mucho cuando notaste una enorme sombra sobre ti que pasó muy rápido a tu lado.
Te cubriste por instinto en ese momento y notaste que habían tomado algo de tu mano.
-"Hey!" Gritaste quejandote
Te habían robado tu brujula.
Notaste la silueta irse y te gruñiste leve molesta, ya habias tolerado muchas cosas hasta ahora.
-"Devuelveme!" empezaste a decir y tomaste una roca a la cual la ataste con un trozo de liana que había en el suelo "Eso!"
Empezaste a hacer movimiento con la liana y roca, haciendola girar y luego la lanzaste hasta la silueta.
Te asustaste un poco al escuchar un chillido de dolor de golpe y lo viste caer.
-"Oh- no creí que-" dijiste ahora asustada por lo que habías hecho por acto de la frustración que habias sentido
Te maldijiste a ti misma en tu cabeza mientras empezaste a correr hacía quién había caído.
-"Auch... Auch... Ese duele!" escuchaste la voz quejándose
Te acercaste al muchacho ahora en el suelo.
Este al verte se asusto e intentó volar pero empezó a quejarse al no poder.
-"Oh... Espera espera! Detente ahí o te vas a terminar lastimando más!" dijiste deteniendolo
-"Tu me lanzaste esa roca!"
-"Y tu robaste mi brújula!" te quejaste
-"...No!" dijo escondiendo tu brújula detras de su espalda
-"Si lo hiciste! La acabas de esconder!" te cruzaste de brazos
-"Bueno pues!... Un momento..." él te quedó mirando y empezó a verte, dio vueltas a tu alrededor observandote buscando algo en ti "Qué eres?" ladeo la cabeza
-"Hum... No puedes decifrarlo acaso?" ladeaste la cabeza
-"Eres de Johzenji?? Nunca te había visto..."
-"Bueno. Allí estaba yendo! Y necesito mi brújula!"
-"No sabes donde queda tu propio pueblo???"
-"Am! Es que es un secreto..." dijiste mirando a un lado
-"Un secreto?? Eres una de esas espías acaso??" preguntó curioso
-"No debo decirle cosas a los ladrones" te cruzaste de brazos
-"Ugh..." se quejó leve tomando tu brújula y dandotela
La tomaste y guardaste rápido.
-"Verás... Yo estuve de espía en el pueblo de humanos" le dijiste susurrandole "Hace mucho tiempo, y recopilé mucha información, estuve infiltrada en una familia incluso y hoy regresé para comunicarlo"
-"Estuviste con una familia de humanos?? Como ocultaste tu cola??" preguntó preocupado
-"Ellos me la cortaron!" dijiste asustando al chico "Y me hicieron cosas para parecerme más a ellos!"
-"Ah! Son igual de malos que en las historias!" dijo con temor en su rostro
-"Y son muy mentirosos, tenlo en mente! Pero pude escaparme, y ahora necesito irme lo más pronto a Johzenji! Si?" observaste un momento su ala y suspiraste levemente con culpa
-"Oh... Estas preocupada por esto?..." dijo apuntando a su ala "No te preocupes demasiado, mis alas son demasiado sensibles, tardaron demasiado en tener su tamaño y no debería usarlas para rondar por aquí... Pero me encanta volar" sonrió
Más culpable te sentiste por eso.
-"Espera! Tengo algo para ayudarte!" dijiste recordando algo y buscaste en tu sosten
Que era lo único que no habias cambiado en todo este tiempo, junto con tus panties.
De este sacaste un pequeño frasco con un líquido transparente y de un color celeste.
Recordaste que eso había sido una disculpa de parte de Numai por haber sufrido la mordida de Kuguri, y te dio eso por si te llegabas a lastimar de nuevo.
-"Déjame aplicarte esto. Te va a ayudar" dijiste en una sonrisa suave
Él te quedó mirando con algo de duda pero te entregó su ala, extendiéndola.
No tardaste en ponerle con cuidado el líquido en la pequeña herida, el chico se quejó por el ardor.
-"Vas a estar mejor... Lo prometo" Sonreiste
-"Hinata Shoyo" dijo en una sonrisa su nombre "Y tu?"
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-"Oh... (T/n), un placer"
-"Qué bonito nombre! Me suena de haberlo oído..." se quedó pensando
-"Es un nombre común! Lamento haberte lastimado! Y gracias por devolverme mi brújula! Debo irme rápido" dijiste
-"Ven a visitarme a Karasuno cuando puedas!" comentó en una sonrisa saludandote mientras te ibas a trote rápido
Lo saludaste también y seguiste tu camino.
Con aquel pequeño inconveniente perdiste algo de tiempo, esperabas que quienes te buscaban no andén cerca.
