Gatita Gruñona (Saida)

EPILOGO

Sana inflaba su pecho orgullosa de su pequeña cachorra que no se hizo pipi en la cama el día de hoy cómo era de costumbre.

—¡Sana! -Llamo la omega desde la cocina-¡El desayuno está listo!

-Vamos Saida-la alfa tomo a la pequeña cachorrita en brazos y bajo a la cocina poniendo a la bebé en la silla especial.

-Mina dijo que quería llevar a Saida a su casa para que jugará con sus cachorros y que pasaría por el cuando terminara su desayuno-Dahyun miro de reojo a su pequeña cachorra que empezó a comer rápidamente al saber de la noticia.

-¡TELMINE! -Dijo Saida poniendo su plato vacío en la mesa-Vamos con la tía Mina -Se removió en su sillita desesperada por bajar de ella y subir al auto.

-Espera cachorra aún no hemos desayunado, además no te comiste las zanahorias —Dijo Dahyun, la bebé hizo un puchero y es que no le gustaban las zanahorias.

-P-pero... mami... -Dahyun cruzo sus brazos y lo miró fijamente, la cachorra sólo pudo bajar la cabeza y hacer un puchero para luego empezar a comer sus zanahorias bajo la atenta mirada de su madre omega.

Mientras que Sana también empezaba a comer sus verduras, no quisiera hacer enojar a su linda gatita.

-Vamos mami, corre, tenemos que llegar con tía Mina -la pequeña niña jalaba con todas sus fuerzas a su madre alfa, no logrando nada ya que no movía ni un centímetro a su madre que se estaba despidiendo de su omega.

-Llegó en quince y cuando llegue quiero tu culito listo para mi-Parece que Sana nunca aprende, Dahyun solo cerró la puerta en su cara y la alfa suspiro.

--Bien, vámonos Saida, tu quieres llegar a jugar con los cachorros de tia Mina y yo quiero jugar con tu madre cuando vuelva.

-¿A qué van a jugar mami y tú? - Saida ladeó su cabeza confundida.

-Juegos que solo los adultos podemos jugar. Cuando seas una adulta tu también podrás jugar a esos juegos.

Saida quedó aún más confundida, aveces su Mama era muy rara y nunca entendía lo que le decía.