No bailo

240 41 22
                                    

24 DE JULIO 2021

Entró al aula y sintió su corazón latir con fuerza. Era como estar en el cielo. El aire acondicionado, el piso de linóleo, el gran espejo en las paredes, las barras, las ventanas, las luces, las sillas, los casilleros.. se sentía tan doloroso pero también tan estupendo.

Se sentó en el suelo y dejó su mochila a un lado, poniéndose con emoción las ballerinas. Aunque estuviera ansioso se las colocó y ató perfectamente, recordando todo como si jamás lo hubiera dejado. Entró a bailar desde hacia solo tres años pero, como decían todos los que lo veían bailar, él tenia un talento innato que pulió con los años.

Aunque creía que todo era gracias a que desde muy pequeño fue parte de muchos equipos deportivos, le gustaba presumir eso.

Se levantó y puso música en su celular. Esas canciones ruidosas que amaba y Misato detestaba pero que aun así escuchaba con él. Fue a la barra para estirarse y calentar, había llegado mas temprano para poder tener todo el salón para él.

-Disculpa, ¿aquí se encuentra la profesora Watanabe? -esa voz lo hizo romper su burbuja. Volteó a ver de quien se trataba con desinterés, era un chico castaño, parecía de su edad aunque un poco mas alto, su camiseta decía "hope is my superpower" y sus pantalones eran deportivos. No lucía como un estudiante, eso seguro.

-No y no sé donde está. ¿Quién eres?

-Mi nombre es Shotaro Futaba, mucho gusto. -se presento educadamente, haciendo una reverencia.

-Shotaro.. Futaba. ¿Bailas?

-¿Qué? ah. No, no, para nada, no vine por eso.

-¿No viniste a bailar a una academia de baile? -rió, era un chico interesante. Siguió estirándose pero ahora le ponía atención.

-El.. La.. chica que me gusta.. practica ballet. Yo.. quería estudiar un poco para entenderla así que vine a la academia en donde estudió. -murmuró sonrojado. Mashiro alzó la ceja pero después le sonrió, entendía perfectamente eso.

-Oh, el amor. -volvió a reír, no se estaba burlando, era una risa nostálgica. Misato estaba en todos lados, incluso en la palabra amor.- yo también inicié en el ballet por amor, pero no me fue muy bien.

-¿Qué sucedió?.. si me permites preguntar, lo siento.

-Ah, descuida, me agradas, Futaba. -se alejó de la barra y empezó a avanzar hacia él con grand jete, era tan.. precioso. Como un cisne, volaba pero era agraciado. Sin embargo su rostro era tan.. triste. Con ojeras, los labios secos y sus ojos reflejaban tristeza, casi sin vida. Futaba quedó tan hipnotizado, podía ser incluso mejor que..- es un él. ¿Eso te molesta?

-¡Para nada! -respondió de inmediato.

-Ohh, ahora me agradas aun más. Bueno, él ama el ballet. Pensé que si yo también bailaba podríamos compartir ese amor y solo tal vez me amaría también. Lo creí, por un tiempo, pero ahora ya no está, me dejó.

-Eso es.. triste.

-Sí.. pero me quedé con el ballet. -una sonrisa se escapó de sus labios. Si.. se quedó con el ballet. Podía sonar como algo bueno, pero demonios, aunque amaba bailar el veneno de Misato estaba arruinándolo.- ¿por qué buscabas a la maestra Watanabe específicamente?

-Oh, e..lla, la menciono. Es fin de semana y solo queda a dos horas de mi ciudad. Creí que conocer el lugar me haría entenderlo un poco más.

-¿Dos horas? no está tan lejos, lo vale. Bueno, puedes verme, te enseñaré algunas cosas mientras la esperas.

-¿En serio? ¡gracias!.. umm, ¿cuál es tu nombre?

-Mashiro Tsukiyuki. -y la sonrisa de Futaba despareció.

Cartas de un corazón roto que jamás leerás | Bakuten!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora