Carta a mi amado Esteban

48 7 1
                                    

Para: Esteban Rosario

Oh mi querido Esteba, mi corazón sufre ahora que no estoy contigo, no entiendo porque me alejaron de ti, solo nos separaron por capricho, por mera idiotez, lo sigo sin entender, pero ya paso un tiempo desde que te escribo, espero no me hayas extrañado mucho, ¿cuántos cumples este año? dieciséis ya verdad, uf, ya han pasado cinco años, esto se ha extendido dos años más, pero este año será el bueno, este año te iré a ver querido.

No puedo olvidarme de lo traumatizante que fue nuestro último encuentro, tu estabas llorando, siempre fuiste un niño tan débil, los maestros decían que parecías como una linda chica, yo siempre estuve en contra de ellos, claro por tu honor querido, pero aun así yo sabía que te convertirías en un joven guapo, a veces fantaseo me imagino como serás ahora, y te veo tan claro como el agua, un cuerpo fuerte con una mandíbula marcada, dientes blancos y seguramente para este tiempo incluso más alto que yo, te imagino tomándome por la espalda mientras cocino, cargándome a la mesa de la cocina y mientras estoy ahí tú me acariciarías con un cuchillo, pasarías tu mano izquierda por mi cuello, me morderías las tetillas y tu pene, ya más grande penetraría en mí como yo te enseñé hace un tiempo. Oh, perdona querido, esta carta era solo para recordarte y termine con una erección, mi amor, eres un travieso.

Mi Dios, estaba recordando la última vez que nos vimos y desvaríe en mi mente, pero retomando, la última vez que nos vimos fue algo horrible, espero que tu no lo recuerdes tanto, estábamos en clase, que habría estado dando, fracciones creo, si, si estábamos viendo fracciones ¿le entendiste al tema? Bueno cuando vuelva yo mismo te las explicare. Ese día tu estabas muy nervioso, te invite a mi casa como usual, llegamos a la casa y te lleve a la cocina, te di el helado de chocolate que tanto te gustaba, lo puse en mi pene, a ti te brillaron los ojos, siempre estabas tan feliz cuando comías del helado así, era increíblemente tierno.

Empezaste a lamer con tus ojos cerrados, tus cachetes se pusieron rojos de la vergüenza, eras tan bueno, sentía tu campanilla, y gemías tan bajito y tan hermoso tus manos estaban en mis muslos y llevabas tus manos de arriba abajo, la saliva escurría hasta mis nalgas, empecé a gemir y me corrí en tu boca, tu saliste y me sonreíste, mi semen se escurría por las comisuras de tus labios y al solo ver eso me puse duro de nuevo.

Era tan joven y brusco en ese tiempo que te senté en mis piernas y te empecé a besar, tu lengua era tan chiquita, eras tan delgadito te tome del pecho y te acosté en el sillón de la sala, lleve el helado y lo puse en tus tetillas, y las lamí, de fondo se escuchaban las canciones de Cri Cri, era muy bonito ese gusto tuyo en música. Te seguía lamiendo, tú ya estabas creciendo y tu pene se puso erecto, puse algo de helado en tu pene y tu juntaste tus piernas, y susurraste "Esta frio querido" Dios, ahora mismo no me puedo contener con este recuerdo.

Lo lamí y tu cuerpo apenas reproducía semen, al probarlo se sentía algo más como agua, no era tan blanco, ahora tu semen debe de ser más blanco y más pegajoso. Ese día nos divertimos mucho, dormimos y al siguiente día era sábado, pero llegaron policías a la casa, destruyeron todo de arriba abajo, tus fotos las sacaron, nuestros videos, tus peluches, todo lo sacaron, a ti te sacaron sin ropa, tu cuerpo hermoso vio la luz del día sin ninguna clase de prenda, te veías como un pequeño ángel llevado por un par de horribles demonios, llorabas y te veías tan triste lo último que te escuche decir antes de que me metieran en la patrulla fue "¡¡Querido búscame, te esperare, te esperare querido!!"

Espero que no hayas roto esa promesa, saldré pronto veras que sí, respóndeme pronto.

Nos vemos querido.

Firma

Ing. Roberto Campusano 

10 CARTAS DE AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora