DEAD 1. Cortes Y Tatuajes.

1. Nada ni nadie es perfecto.

Sharon, 17 años, pelo oscuro, labios color negro, ojos apagados sin vida de color gris, camisa y pantalones punk, ningún tatuaje, 4 piercing...

Esta soy yo, como veis, no soy para nada perfecta.

Tengo el presentimiento de que te va a gustar toda mi historia...

¿Te hago un resumen rápido?

Desde los 9 años he estado sola, mi padre y mi madre no querian saber nada de mi.

Recién cumplidos los 14 años, fui ingresada en el famoso psiquiátrico "Vanakhat". Veía cosas que nadie veía, escuchaba voces, me sentía observada, yo misma sabia que todo era cosa de mi cabeza, pero prefería estar ingresada en el psiquiátrico acompañada de mis compañeros que estar sola en la calle como una rata que busca un pequeño rincón para dejarse morir.

Pasaron los días en el psiquiátrico...

Lesly, era mi "enfermera", ella se ocupaba de que nos tomáramos las patillas, revisaba las celdas en las cuales dormíamos...etc.

Debo asumir que era una zorra, una zorra que no se merecía ni vivir.

Día a día, ella me empezó a coger manía... yo deje de tomar las pastillas, de comer, y me tiraba día si y día también escribiendo en las paredes de mi celda números sin sentido ninguno.

Un Lunes, ella me despertó mas temprano que a los demás, me pincho una jeringuilla en la cual yo pensaba que era una nueva dosis, pero no. Era para que me quedara dormida mas tiempo...

Desperté en el suelo, con una soga en el cuello, la cual estaba muy apretada... alado mía una silla. Me asuste y grite lo mas alto que pude.

2 vigilantes me vieron y al instante abrieron la celda y me arrastraron hasta la habitación muda.

La habitación muda es la habitación que da mas miedo de todo el centro.

En ella había una piscina con agua congelada y una silla, un sillón eléctrico, un potro con pinchos y un péndulo.

Ellos me cojieron y me sentaron en la silla de la piscina de agua fría... supuestamente era una técnica para forzar al cerebro a volver a ser normal.

La silla empezó a bajar...el agua congelada tocaba mis pies, yo gritaba, gritaba como si me fuese la vida en ello...cada vez la silla bajaba poco a poco y yo sentía como se me engarrotaba la piel... me alcanzo las costillas, y deje de gritar, me dolía la cabeza, las lagrimas se me escapaban una a una...no podía mas, pensaba que iba a morir...la silla seguía bajando, me llego al cuello.

Los hombres se reían...empecé a gritar otra vez...mi cabeza fue tapada por el agua...aguante la respiración 12 segundos... intente respirar, trague agua, notaba como mis pulmones hiban llenándose de agua poco a poco. Mi corazón nunca había estado mas alterado que en ese momento...quede inconsciente, lo único que recuerdo fue que la silla empezó a subir y me dejaron en una camilla en mi habitación...

Desperté de golpe, estaba sola como de costumbre...

Recordaba poco a poco lo que me había pasado... empecé a llorar...¿Por qué a mí?, Me pregunté.