Tropiezo con el Amor

Ella está prohibida

—¿Disculpa? ¿Pepper es tu cita? —

—Sí, ¿Por qué te sorprende? — pregunto cruzándose de brazos.

—No puedes salir con ella— dijo serio, caminando de nuevo a su escritorio algo molesto, no le parecía nada el rumbo en la que iban las cosas.

—¿Por qué no? Ella no tiene novio. A demás ella acepto salir conmigo. —

—Es que.... No puedes. Ella es la única mujer en el mundo con la cual no puedes salir. —

—¿Por qué? Ni que fuera tu novia o hermana para que lo prohíbas eso. —

—Steve ya te dije que no... es que sería raro que salgas con ella cuando, pues... es mi asistente— mencionó como si fuera obvio, Steve se acercó a él tomando asiento en frente de él, divididos por el escritorio.

—No tiene nada de raro. Es como Wanda y Visión, salen y trabajan juntos.

—Eso es diferente, ninguno trabaja para mí, además somos amigos, Pepper y tu ni siquiera se conocen. —

—Hasta ahora, ella es muy simpática. Tony deja de estar de pesado, saldré con Pepper quieras o no, no eres nadie para prohibirlo y tampoco te tenemos que pedir permiso. —

Steve estaba disidido en salir con Pepper, se sorprendió en que Tony se enojara o disgustara con la idea, —para empezar, él siempre trató a Pepper como si no existiera y ahora que menciono la cita la defiende como si de verdad le importara— eso si era demasiado raro, conocía muy bien a Tony. No era porque sea raro para él, sino por otra cosa aun mayor Tony no quiere que Pepper tenga citas con alguien. Sería raro que no quiera que tengas citas, debido a que él se casaría, no tiene derecho alguno de prohibirle que salga con alguien, a menos que sienta algo por ella, entonces sería un problema para Tony, estaría en un camino sin salida. Apunto de casarse y amando a otra ¿Quién hace eso? Y ¿Por qué?

El soldado prefería en no pensar en que Tony este enamorado de Pepper porque si eso era verdad, Pepper podría sentir lo mismo por él. No, no pero no y no, borro esa idea de su cabeza antes de arrepentirse de salir con Pepper por culpa de sus pensamientos sobre cosas que no han sido confirmadas y tampoco deseaba que fueran realidad.

Tony por otro lado le hervía la sangre por los celos, Pepper no se molestaba en avisarle que saldría con Steve —¿Quién se creía? — solo esperaba paciente en que ella mencionara el tema para decirle un rotundo no, Steve y ella no podían por nada sentir algo, si ella llega a sentir cosas por ese capipaleta la perdería y para nada sería bueno, ya no la tendría más para él, esa cita no tenía que realizarse.

Los días pasaban y Pepper no mencionaba sobre la cita sobre Steve como tampoco había podido llevársela a la cama, ella se negaba, comenzaba a preocuparse, su rechazo constante solo significaba una cosa —Quería algo serio con Steve— no podía permitir eso, tenía que lograr que Pepper no se aleje de él.

No pudo más guardar silencio y mientras Pepper estaba parada frente a él anotando todo lo que le pedía hacer, con aquel semblante serio que la caracterizaba muy bien. Hablo:

—¿Por qué no me has dicho aun, que saldrás con Steve Rogers? — dijo en tono serio, apoyándose con la espalda en el respaldo de la silla.

Esa pregunta le cayó por sorpresa a Pepper, alzo la cabeza, mirándolo directamente a los ojos, se plantó y sosteniendo la seriedad, hablo —Eso a ti no te importa— dijo de forma seca, para que no le preguntara nada más y tampoco intentara averiguar algo, pero eso no fue suficiente para Tony.

—Claro que me importa, eres mi asistente, todo lo que hagas lo tengo que saber. —

—No, mi vida personal es privada. Tú y ni nadie tiene por que saber lo que hago o con quien salgo. — le dijo en tono serio con una pisca de molestia ante la exigencia de Tony ¿Desde cuándo le importa su vida y relaciones?